El camino, que atraviesa la línea del tren rota por las aguas, está bien seco. Abunda el polvo. El sol castiga, y no puedo mirar el teléfono. El resplandor no deja ver. Tapo la pantalla con la mano. Pongo mil veces el celular en modo avión, ya cansa; aprieto y vuelvo a apretar los datos. Nada. No comunico. No habrá tuit.
Basta que el peligro mortal aceche a alguien para que acá se desencadene la audacia y el coraje de incontables prestos a salvarlo, aunque en el intento puedan perder la vida, una cualidad de amor por el prójimo desarrollada y enraizada a partir de aquel enero redentor.
¿Hacia dónde va la izquierda en el mundo?
Cuentan que Akira Kurosawa, uno de los grandes maestros del cine mundial, era capaz de aguardar días y semanas completas a la espera de una tormenta.
No es nada extraño que un ciudadano de cualquier país, especialmente de aquí, le escriba al Presidente de Estados Unidos y que este le conteste. Me imagino que lo más probable es que el primer mandatario ni vea las misivas y que sea alguien de su equipo el que redacte una respuesta. No importa quién sea el que escriba la respuesta, ni incluso si tengan preparadas respuestas genéricas, el hecho es que raro sería que el contestatario nunca reciba una carta de contestación.
El Chama llega a la casa y hay silencio total. Hoy la madre llegará tarde: lo puso en una nota sobre la mesa. «La comida está hecha —escribió—. Solo tienes que calentarla. Besos».
PRIMERO que todo, me gustaría agradecer al Primer Congreso Internacional sobre infancias y adolescencias Creciendo al futuro por darme la oportunidad de exponer mis ideas y que estas sean escuchadas y valoradas.
Hay sencillas palabras que devienen inmensas para atrapar una circunstancia, como esa de «Aquí sí hay que trabajar», acuñada por compatriotas que emigraron a descubrir nuevos horizontes. Me suenan los oídos de solo imaginar la avalancha de explicaciones para refrendar si es cierto o no.
Isla Verde, el Primer Festival de Cine y Medio Ambiente del Caribe que se realizó en Cuba con sede en Isla de la Juventud, además de excelentes filmes, documentales, buenas vibras y «famosos» cubanos departiendo con las personas, dejó también varios mensajes sobre cómo activar resortes para llamar a la acción a favor de la naturaleza y estilos de vida saludables.
Visten uniforme, es cierto. Cumplen reglamentos con disciplina, como debe ser. Acatan tareas que benefician a todos, muchas veces bajo el estricto peso del silencio. Hoy lo hacen, y si volvieran a nacer, con certeza también lo harían. Quizá lo más gratificante es saberse parte del pueblo, del mismo pueblo que cuidan con celo.