El Presidente Barack Obama y el Vicepresidente Joe Biden, en el Rose Garden de la Casa Blanca esta mañana. Autor: Casa Blanca Publicado: 21/09/2017 | 06:13 pm
El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, admitió este miércoles que Cuba y su país dan un «paso histórico» y no un «paso simbólico», al anunciar la reanudación de relaciones diplomáticas y la reapertura de embajadas, e instó al Congreso norteamericano a que «escuche al pueblo cubano y al pueblo estadounidense» y empiece a trabajar para levantar el bloqueo sobre Cuba.
En una declaración desde los jardines de la Casa Blanca, el mandatario instó a los congresistas a avanzar en la legislación necesaria para eliminar las restricciones que permitan restablecer los viajes y el comercio entre EE.UU. y la Isla.
«Hace más de 54 años Estados Unidos cerraba su embajada en La Habana. Hoy restablecemos nuestras relaciones diplomáticas con Cuba», anunció Obama.
También su secretario de Estado, John Kerry, hizo declaraciones sobre el acontecimiento. Kerry reconoció que persisten diferencias entre ambos gobiernos, pero señaló que ambas partes han identificado áreas de cooperación como migración, telecomunicaciones y seguridad.
El secretario de Estado afirmó que el actual paso permitirá una interacción más frecuente entre diplomáticos de Estados Unidos y Cuba, así como crear facilidades para que el Gobierno de Estados Unidos asista a sus ciudadanos para viajar a la Isla.
«El presidente Obama tomó la decisión de cambiar una política que no funcionó», sostuvo Kerry. «La apertura va a ayudar a cambiar las relaciones en la región por completo», vaticinó Kerry, según Telesur.
Este primero de julio, un intercambio de cartas entre los presidentes Raúl Castro y Barack Obama oficializó la decisión de los dos gobiernos de restablecer las relaciones diplomáticas, rotas por Estados Unidos en 1961. En esas misivas se comunicó que el 20 de julio serán abiertas embajadas en La Habana y Washington.
Tras anunciar la decisión de iniciar ese proceso, el 17 de diciembre de 2014, los dos países sostuvieron tres rondas de conversaciones —en enero, febrero y mayo— que condujeron a la retirada de Cuba de la lista de países patrocinadores del terrorismo. Temas como migración, telecomunicaciones, correo postal y restricciones de viaje fueron abordados en estas pláticas oficiales.
El anuncio de este primero de julio es apenas otro paso en la normalización de relaciones, algo que no será alcanzado mientras persistan el bloqueo y las acciones de desestabilización del sistema cubano promovidas desde Estados Unidos y mientras este país no devuelva a la Isla la parte del territorio de Guantánamo que domina contra la voluntad del pueblo cubano. Cuba espera, además, compensación por los daños humanos y materiales que el bloqueo y acciones violentas fraguadas en el país vecino han causado en más de 50 años a su población.