La paz en Siria parece una quimera. Fracasó la iniciativa del enviado especial de Naciones Unidas y la Liga Árabe, Kofi Annan, para frenar la violencia e impulsar un proceso de diálogo político. Los grupos opositores armados, alimentados con hombres, dinero y armas procedentes de países de la región y el apoyo político y diplomático de las potencias occidentales, continuaron sus ataques y acciones terroristas. Ante esta situación, era demasiado pedirle a Damasco que retirara sus tropas y sacrificara la seguridad y estabilidad nacional.
X se mueve incómodo. Detrás de él un muchacho aindiado, vestido con camiseta, dice: «¡Qué complicación la mía, caballero!». En el comienzo de la cola, ante la ventanilla de Etecsa, la mujer comienza a mover el pie con un tic nervioso. «Deje, deje eso…, déme una tarjeta nueva —le dice a la persona que la atiende—. Si no entra el número, no importa… Déme una tarjeta nueva».
Hoy, por la senda derecha dejando atrás el parquecito, desando la Calzada de Tirry y me detengo en el número 81. Una vez más, me dispongo a traspasar el umbral de la vieja y romántica casona —reino de pasiones y versos— con el anhelo de aliviar una carga terrible.
De niño siempre me llamaste la atención. Cuando pasaba por tu lado, me incitabas a una mirada diferente, un vistazo de incertidumbre ingenua, una impresión de rareza, de «no sé lo que me dicen ni lo que tú significas». Imagínate, yo guajirillo que en mis viajes esporádicos a la ciudad divisaba medio asombrado tus estructuras con apariencia de «ciudad» multifamiliar. ¿Tu nombre? Tu nombre era lo más inexplicable para mí.
Respeto (respect, en inglés). Esa fue la máxima «empotrada» por la Unión Europea de Fútbol (UEFA) en los brazaletes de los 16 capitanes de equipos participantes en la recién finalizada Eurocopa de Polonia-Ucrania, que cerró con el categórico triunfo de España ante Italia (4-0).
Las nuevas generaciones, sobre todo los adolescentes, crecen en «un mundo entre pantallas». Pensemos en el tiempo que dedican a la televisión, a la computadora y al teléfono celular.
Las palabras suelen tener doble personalidad. Es decir, se distinguen por uno o varios significados, pero estos pueden desplazarse hacia otro sentido. Los poetas emplean con acierto esa dúctil virtud. Y también ciertas intenciones políticas recurren a la técnica de modificar el diccionario para expresar su posición o inclinación ideológica y encubrir sus fines e intereses. Y aunque no sea original al definirlo, tiro al aire recurso tan común para comprobar sus inconsecuencias.
El fenómeno del burocratismo ha sido objeto de crítica desde la consolidación del Estado moderno y la formación de las grandes empresas.
Alborada y atardecer son dos transiciones opuestas del tiempo y la luz. Una despierta y alista hasta levantar el día con los primeros oros del sol: sugiere ascenso. El otro va cerrando cuentas con malvas y granas, hasta sumirnos en el recuento y la intimidad: es caída, ocaso del fárrago y pase a la ensoñación.
Cada vez más, Turquía entierra su política exterior «cero problemas con nuestros vecinos». Ese es un principio del que hace gala el canciller Ahmet Davutoglu, y que a todas luces no aplica hoy en la crisis política y la violencia que enfrenta Siria, fronteriza con la nación otomana.