Las japonesas que quieran dormir abrazadas ya no necesitan un novio o un amigo. Después que existe Soine-ya Prime todo es más simple. Este servicio ofrece la posibilidad de contratar a un hombre joven y guapo para pasar una noche en sus brazos. Y aunque usted no lo crea, no hay nada sexual en ello. «A veces solo quiero meterme en la cama y sentir los brazos de alguien, sin otra intención», fue la queja que recogieron los dueños de esta empresa japonesa. Manos a la obra y ya solo tiene que contratar al galán… y cuidadito si le entran ganas de más… «Está terminantemente prohibido besar a nuestros hombres», rezan las reglas. ¿Funcionaría para las cubanas?