Luego de un inicio de año optimista, el arribo de viajeros internacionales al país continuó desacelerándose. En el mes de junio cayó incluso por debajo de lo registrado en igual mes de 2013 —que tampoco fue bueno—, al llegar al 98,6 por ciento, y esto incluye hasta la caída de un punto porcentual en el primer mercado emisor: Canadá.
La llegada de visitantes internacionales es un índice clave para el turismo, en especial en Cuba, donde, por la naturaleza de sus servicios, se relaciona directamente con los ingresos del sector que, como sabemos, constituye una de las primeras fuentes de entrada de divisas frescas al país.
No es noticia nueva. Se conoció en la pasada sesión ordinaria de la Asamblea Nacional. Adel Yzquierdo, ministro de Economía y Planificación, al hacer un balance del bajo crecimiento de la economía en el primer semestre del actual año, señaló a esta industria entre las que menos cumplió con el plan previsto. Señaló que tiene problemas hacia lo interno e incluso en el trabajo de promoción en los mercados foráneos.
Ahora los datos están listos y disponibles en Turismo. Llegada de visitantes internacionales. Enero-junio 2014, publicación de la Oficina Nacional de Estadísticas (ONEI).
A pesar del mal mes de junio, en los primeros seis meses del año el turismo creció 3,9 por ciento. A ojos vistas no es un dígito malo, pero a ese ritmo difícilmente pueda llegarse al tan ansiado número de tres millones de visitantes, una barrera psicológica que no acabamos de superar y a veces parece inalcanzable.
Estamos en la etapa de la llamada «baja turística». Es de esperar que, como ocurrió en 2013, haya una recuperación en los últimos meses del año, cuando despega «la temporada alta». No estamos tan mal como aquel período; de todas formas, habrá que «hilar fino» si no queremos llegar con susto o maratones de última hora a los tres millones de turistas y excursionistas.