Ramón Verdecia preguntó:
Ejemplos: E-learning: Enseñanza a distancia caracterizada por una separación física entre profesorado y alumnado sin excluir encuentros físicos o puntuales. E-learning: enseñanza a distancia caracterizada por una separación física entre profesorado y alumnado sin excluir encuentros físicos puntuales.
Prescribe la Ortografía de la lengua española (RAE, 2010) que después de los dos puntos debe escribirse minúscula, con excepción de los nombres propios.
Ciertamente, muchos diccionarios comienzan la definición con mayúscula, siguiendo modelos lexicográficos antiguos en los que se usaba mayoritariamente el punto y seguido seguido de mayúscula, como corresponde según la convención.
Con el paso del tiempo muchos diccionarios siguen usando mayúscula aunque coloquen los dos puntos y seguidos, contrario a lo que ortográficamente es correcto. (Depto. de Lingüística, ILL)
Ernesto Piñero preguntó:
Según la Ortografía de la Lengua Española (2010), los dos puntos pueden concurrir con los signos indicadores de modalidad (signos de exclamación y de interrogación o puntos suspensivos). Se señala además que los dos puntos se escriben siempre pospuestos a los signos anteriormente mencionados.
Magali preguntó:
Debe colocarse mayúscula después de los signos de exclamación e interrogación. Sobre la convivencia entre los signos de interrogación y exclamación y los signos de puntuación aclara la Ortografía de la lengua española (RAE y ASALE, 2010:393-394) que: (...) pueden coaparecer con cualquiera de los signos de puntuación, salvo con el punto. Cuando estos signos coinciden con otro en un mismo lugar del enunciado, deben seguirse las siguientes pautas: a) Si los signos de interrogación y exclamación finalizan el enunciado, no debe añadirse tras ellos el punto de cierre. Lógicamente, el enunciado siguiente ha de comenzar con mayúscula: ej. «!Ay. perdón! La soda siempre me hace eso» (Santiago Sueño [P. Rico 1996]). «¿Mi marido? El desdichado está más ausente del mundo que un yogui» (11Duran Toque [Col. 1981]). b) La interrogación y exclamación sí pueden colocarse sin delimitadores principales, como la coma, el punto y coma o los dos puntos, sin dejar entre ambos signos ningún espacio de separación: ej. «Si, ¿por qué negarlo?: aquellas mujeres, que se diría constituidas en una especie de jurado de concurso televisivo, le ponían nervioso» (Goytisolo Estela [Esp. 1984]). «!Juro que te arrepentirás, Mayra!; a partir de hoy empieza una guerra sin cuartel»(Olivera Enfermera [Méx. 1991]). (Dpto. de Lingüística, ILL)