Las acciones de Johnson & Johnson se han hundido en Wall Street un 10 por ciento. Se trata de su peor sesión en más de una década. La razón es la información divulgada por Reuters sobre que la compañía conocía que sus polvos de talco estaban contaminados por amianto. Autor: Juventud Rebelde Publicado: 18/12/2018 | 09:34 am
El valor de las acciones de la reconocida compañía farmacéutica Johnson & Johnson se han hundido en Wall Street en alrededor de un 10 por ciento poco después de que la agencia Reuters publicara una noticia en la que aseguraba que la empresa conocía desde hacía décadas que sus polvos de talco contenían pequeñas cantidades de asbesto (también conocido como amianto), un mineral con efectos nocivos para la salud. Supuestamente, J&J conocía esta característica de sus productos desde 1971, tal y como figura en numerosos informes internos y otros documentos confidenciales de la farmacéutica.
De inmediato, la empresa ha intentado desmentir las acusaciones en un comunicado donde expresaba que "El artículo de Reuters es unilateral, falso e inflamatorio. En pocas palabras, la historia de Reuters es una teoría conspiratoria absurda que aparentemente ha durado más de cuarenta años y que ha sido orquestada por generaciones de reguladores globales y los científicos y las universidades más destacadas del mundo, así como los laboratorios independientes más importantes y los propios empleados de J&J".
Hace unos meses, la máxima autoridad sanitaria de Estados Unidos, (FDA, en sus siglas en inglés), realizó un estudio con muestras del producto en las que no detectó presencia de asbesto. Sin embargo, en agosto del pasado año un jurado estadounidense ya había condenado a J&J a pagar 417 millones de dólares por no advertir del riesgo de cáncer vinculado al uso de sus productos de talco y, en julio de 2018, otro jurado ordenó a la compañía a indemnizar con 4.690 millones de dólares a 22 mujeres y sus familias que responsabilizan a sus productos de talco de haberles causado cáncer de ovarios.
Aunque la mayor parte de las personas expuesta al mineral nunca desarrolla cáncer, para otras personas una exposición, aunque sea pequeña, resulta suficiente para desatar la enfermedad años después. De hecho, muchos demandantes alegan que las cantidades que inhalaron cuando usaron el producto fueron suficientes.
El asbesto o amianto, un producto potencialmente cancerígeno si sus fibras se respiran, ha sido un componente habitual en el talco mineral. Los productos de la compañía también se han relacionado con el mesotelioma, una forma rara y mortal de cáncer que afecta el delicado tejido que recubre las cavidades del cuerpo.
Las primeras menciones de polvo de talco con asbesto datan de unos informes de laboratorio de 1957 y 1958. Desde entonces y hasta principios de la década de 2000, la compañía tuvo acceso a similares informes elaborados por laboratorios independientes y sus propios científicos.
En 1976, J&J aseguró a los reguladores que no se había detectado la presencia de asbesto en ninguna muestra de talco producido entre 1972 y 1973. Sin embargo, en al menos tres tests de tres laboratorios diferentes entre 1972 y 1975 sí se había encontrado, y en un caso con niveles "bastante altos".
Con información de agencias