Costa de Sauípe, Brasil.- La I Cumbre de América Latina y el Caribe (CALC) inicia este martes como un eventual proyecto de concertación entre los mecanismos integradores de la región, sin la tutela de potencias extraregionales, informa Prensa Latina.
Los dignatarios llegan a este balneario del noreste de Brasil, convocados por Luiz Inácio Lula da Silva, con el propósito explícito de impulsar la coordinación entre las naciones, basados en el principio de la solidaridad y la cooperación.
El canciller Celso Amorim reveló ante sus homólogos en la cita previa de Río de Janeiro que los mandatarios discutirán sobre los programas integracionistas y las probables herramientas de interacción, sin descartar en el futuro la creación de un mecanismo único.
De acuerdo con el jefe de diplomacia brasileña, este foro es inédito por ser la primera vez que se reúnen las naciones latinoamericanas y caribeñas sin ser convocadas por una institución externa.
En la agenda preparada para los debates de los jefes de Estado y Gobierno, la cooperación será clave para el acercamiento pese a la diversidad propia de las naciones de la región.
La I CALC sobre integración y desarrollo reflexionará en torno a los graves problemas comunes, la actual crisis financiera, el comercio, los precios de los alimentos, los cambios climáticos y los desastres naturales.
El proyecto de declaración final establece los principios y acciones concretas para evitar la temporalidad y, por el contrario, impulsar su convocatoria con cierta periodicidad, para hablar con voz propia, como aseguró Amorim.
Los gobernantes insistirán en la necesidad de acercar posiciones para enfrentar la crisis global, con respeto al derecho internacional, trato especial a las economías más vulnerables y el rechazo a medidas coercitivas unilaterales, como el bloqueo estadounidense contra Cuba, indica el texto.
América Latina y el Caribe tienen una población de más de 300 millones de habitantes, tienen enormes recursos naturales y energéticos, y problemas comunes.
Estados Unidos quedó fuera de este foro, limitado a 33 naciones y no las 34 de la Organización de Estados Americanos, mientras el mecanismo iberoamericano esta ausente, con la exclusión de España, Portugal y Andorra.