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El presidente Hugo Chávez Frías le dio el nombre de CheyFidel al Batallón de médicos y estomatólogos recién llegados. Autor: Yander Zamora Publicado: 21/09/2017 | 04:51 pm
CARACAS.— El Teatro Teresa Carreño desborda de entusiasmo con un público que esta vez es el protagonista principal de una historia de humanismo y ética. Su vestuario: las batas blancas de un ejército de vida. Se recibe al contingente de 220 médicos cubanos que completan los consultorios de la Misión Barrio Adentro, la atención primaria a la salud al pueblo venezolano, sumándose a quienes ya reimpulsan este programa.
Es un momento especial, 8 de octubre, Día de la Medicina Integral Comunitaria, y les acompañan en la celebración, que rinde tributo al Che y le hace más vivo y presente que nunca, los más de 2 000 estudiantes bolivarianos de 4to. y 5to. años, llegados también desde Cuba, en esta oleada multiplicada, y una amplia representación de los 24 811 venezolanos y venezolanas que cursan Medicina en su patria.
También están en esta tarea grande el verdadero talento de la Patria de Bolívar, los médicos de varias generaciones conocedores del sentido humanitario de su profesión, y junto a ellos numerosos especialistas cubanos y profesores de esa masa joven luchadora de este presente.
El presidente Hugo Chávez Frías le da nombre al Batallón recién llegado: CheyFidel, así, como un solo apelativo, simbiosis perfecta del humanismo revolucionario. Y dirigiéndose a toda esa juventud, a la que califica como «nuestra bomba atómica, los médicos y estudiantes», asume la exhortación que poco antes hiciera uno que fue de los excluidos, José Gregorio Hernández, un fornido mulato de 45 años, abierto a las posibilidades brindadas por su Revolución, por eso está a punto de concluir el 4to. año de la carrera.
«Solo les pido que mantengamos nuestros principios éticos, morales, humanistas; que no nos rindamos, que no nos vendamos, porque la historia y la gente están con nosotros y si nos equivocamos, ni la historia, ni la gente nos van a perdonar».
Chávez lo retoma: «José Gregorio hizo un llamado, que aquí nadie se rinda, que aquí nadie se venda, que aquí nadie traicione».
Hay firmeza en las expresiones, fortaleza en el juramento de estos médicos integrales comunitarios, cuyo objetivo, afirma el mandatario bolivariano que viste ya una bata blanca a instancias de una juventud que le responde, lo dejó plasmado el Che en los años 60: «el trabajador médico debe ir al centro de su nuevo trabajo, que es el hombre dentro de la masa».
Médicos amor adentro
Horas antes, en La Habana, el contingente fue despedido por el doctor José Ramón Balaguer, miembro del Buró Político y titular del MINSAP; el doctor Roberto Morales, viceministro primero de ese organismo; Ronald José Blanco la Cruz, embajador de Venezuela en La Habana y Algimiro Ojeda, vicepresidente del Instituto de Aeronáutica Civil de Cuba (IACC).
«Parten hacia Venezuela cuando allá se celebra el Día de la Medicina General Comunitaria y en una fecha como el 8 de octubre, en que fue herido en combate en la Quebrada del Yuro el Comandante Ernesto Che Guevara y asesinado el día 9, en La Higuera, en Bolivia», expresó el doctor Roberto Morales en la despedida.
«Pensaron que asesinando al Che matarían sus ideas y su ejemplo, pero una vez más se equivocaron los verdugos, porque vive más que nunca en los corazones de los pobres y pueblos del mundo», argumentó.
Dijo que partían a integrarse en la tierra de Bolívar a los miles de consultorios, servicios estomatológicos, centros diagnósticos integrales, centros de alta tecnología y ópticas populares, que conforman la misión Barrio Adentro.
Anunció que en estos momentos se forman en Venezuela, con la ayuda cubana, 27 000 nuevos médicos para esa nación.
Le colaboración médica cubana han propiciado allí más de 373 millones de consultas, ha salvado a más de 226 000 vidas, y de una tasa de mortalidad infantil de 23,4 fallecidos por cada mil nacidos vivos, la han disminuido a 16,7.
«Pueden confiar en que sabremos cumplir la nueva misión que nos han asignado de atender al pueblo venezolano», afirmó el joven médico Jorge Luis Nápoles Pérez, residente de Medicina General de la provincia de Guantánamo, a nombre del personal de la brigada.
