Los países de la Alianza Bolivarina para las Américas (ALBA) exigieron restablecer inmediatamente a al presidente constitucional de Honduras, Manuel Zelaya y acordaron retirar a sus embajadores de ese país centroamericano, hasta tanto Zelaya no vuelva a su pueblo, así como reducir la actividad diplomática, según recoge la declaración emitida por sus miembros este lunes en Managua.
Asimismo acordaron reconocer en sus países solo a los diplomáticos nombrados por Zelaya y pidieron a otras organizaciones como SICA, el CARICOM, la ONU y el Grupo de Río a sumarse a esta actitud.
Según el texto leído por el canciller de Ecuador, Fander Falconi, los países miembros del ALBA se mantienen en alerta permanente e invocan los artículos dos y tres de la constitución hondureña, este último recoge que «nadie debe obediencia a un gobierno usurpador y tiene derecho a la insurrección contra quienes han tomado el poder por la fuerza de las armas».
El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, calificó la reunión de «respuesta rápida» y afirmó que los países del Alba se mantendrán en consulta permanente para seguir evaluando las acciones que logren restituir en cargo al presidente constitucional de Honduras Manuel Zelaya», contempla el texto.
Sobre la decisión de los países del ALBA dijo: «Fue precisa la decisión de retirar nuestros embajadores de Honduras. Y nos reservamos para acciones posteriores. Incluso, invocamos la Constitución de Honduras, que señala el derecho a la rebeldía que tienen los pueblos».
«Le decimos a los golpistas en Honduras, que los pueblos del ALBA estamos dispuestos a apoyar una insurrección constitucional, pues nadie debe obediencia a los usurpadores», aseveró Chávez, quien pidió al ejército y soldados hondureños, que no vayan a derramar la sangre de su propio pueblo.