Lograr que la investigación no sea meta futura, sino praxis cotidiana en los institutos preuniversitarios vocacionales de ciencias exactas (IPVCE), es la virtud de los encuentros de Sociedades Científicas Estudiantiles (SCE) que por estos días se desarrollan en esos planteles, en el contexto de la jornada nacional por el Día de la Ciencia Cubana.
En el evento del IPVCE capitalino Vladimir Ilich Lenin, resaltaron especialmente los trabajos dedicados a la salud humana, tanto en su dimensión biológica como ética, los cuales parten de las evaluaciones curriculares de la asignatura de Biología y permiten profundizar en temas de actualidad cercanos a este grupo etáreo, como el VIH, las adicciones al tabaco y el alcohol, las enfermedades que más aquejan al estudiantado del centro y el beneficio de las vitaminas.
Otros trabajos generaron un debate que trascendió los intereses propios de la adolescencia para acercarse, por ejemplo, a la huella mediombiental del consumismo como estilo de vida, el diálogo intergeneracional en el escenario de una población cada vez más envejecida y el fomento del altruismo y la diversidad de opciones para contribuir al desarrollo de la trasplantología en Cuba.
Estas sociedades científicas funcionan a partir de la resolución Conjunta 2/1988, del Ministerio de Educación y la Academia de Ciencias de Cuba, y cuentan con el apoyo de polos científicos y universidades de todo el país para incentivar la formación vocacional y la sed de conocimientos más allá del aula, cualidades esenciales en un tipo de enseñanza que el próximo 31 de enero cumplirá 40 años.