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COLÓN, Matanzas.— La calidad de la salud pública cubana sufrirá una transformación extraordinaria con el chequeo médico familiar que ya se inició en el país, sostuvo aquí este sábado el Doctor José Ramón Balaguer Cabrera, ministro de Salud Pública.
El también miembro del Buró Político del Partido dijo que esta pesquisa es de gran trascendencia, porque no solo se trata de un método de trabajo sino de un salto de calidad en la salud.
«Cuando termine este proceso en el país empieza el funcionamiento de un sistema de salud único en el mundo, cuyo resultado será una calidad de vida superior de la población cubana, lo cual obliga a luchar contra los factores de riesgo», manifestó el titular del ramo, quien estuvo acompañado por Pedro Betancourt García, primer secretario del Partido en la provincia.
Con el fin de mejorar la calidad de vida de la población y brindar mayor satisfacción a pacientes y familiares, en el policlínico Carlos J. Finlay, de aquí, se pondrá en práctica un programa de atención integral a la familia, que tiene como método la pesquisa activa y que ya se implementa en otras provincias.
En el teatro Mario Muñoz Monroy se efectuó una reunión en la que trabajadores de la salud, delegados del Poder Popular y dirigentes de organizaciones de masas y políticas, debatieron sobre la importancia de esta actividad, la cual permitirá diagnosticar de manera temprana enfermedades no trasmisibles como tumores malignos, cerebrovasculares, accidentes cardiovasculares y diabetes, entre otras.
