Acuse de recibo
El 14 de noviembre de 2013, un inspector de la Empresa Eléctrica revisó el contador de la casa de Tonys Yero, sita en Callejas No. 201-B, en la localidad avileña de Morón, y le impuso multa de 500 pesos, a más de presumir fraude en el consumo energético, al detectar un cable flojo a la entrada del metro contador. Por ello, el cliente también debía pagar retroactivamente la energía eléctrica dejada de facturar durante un año.
Hay que pagar la multa primero, y luego hacer la reclamación en unas 72 horas. El lunes 18 de noviembre reclamaron en la Organización Básica Eléctrica (OBE) municipal. El 20 de ese mes fue una comisión a revisar el metro, y concluyó que sí había fraude: a más de la multa, debían reembolsar 8 762 pesos en un período de tres meses.
El 5 de diciembre Tonys recibió la Resolución 13 que declaró sin lugar su apelación. Conversó entonces con la directora de la OBE, María Teresa Bravo, para que evaluaran el caso, pues el contador no fue manipulado por ellos, y presentaba el sello que le colocaran al instalarlo nueve años atrás.
Durante diciembre varios funcionarios analizaron el caso, les dijeron que podía modificarse el expediente y reducir el monto que se debía pagar, pues se había indicado la cifra máxima. Pero los días pasaban. El 19 de ese mes reclamaron ante la Empresa Eléctrica provincial. Al otro día, la esposa de Tonys fue al Consejo de la Administración Municipal y le dijeron que la atenderían ya en el 2014. Todavía espera.
Mientras los clientes aguardaban por la respuesta de la Empresa provincial, el 22 de enero dos inspectores fueron a su casa a retirar el servicio eléctrico, por no haber pagado los 8 762 pesos. El 24 de ese mes Tonys fue a la sucursal Sur del municipio, y allí le informaron que no tenían conocimiento de la reclamación hecha en la provincia. Ya el 29 de enero, los directivos a cargo del Departamento Comercial de la provincia y el municipio fueron a dar respuesta: el proceso del expediente estaba correcto, y debían pagar el monto. La esposa de Tonys firmó la comunicación y redactó un acta de inconformidad. Ese día, por teléfono, pidieron despacho con el Director a nivel provincial.
El 10 de febrero, en reunión con el Director y el Jefe de los Inspectores a este último nivel, acordaron que visitarían su casa el 18 de ese mes, para revisar el contador. Fueron y sustituyeron el metro por uno nuevo. El viejo lo llevaron a Ciego de Ávila a revisarlo en el laboratorio.
El 25 de marzo, transcurridos 36 días sin respuesta, Tonys llamó al Jefe de los Inspectores en la provincia, quien le comunicó que se presentara en las oficinas de la OBE municipal. Allí le dijeron que con el documento del dictamen final no podían modificar el expediente.
El 28 de marzo, el cliente fue a la Empresa provincial y el funcionario encargado le dijo que se comunicaría con Morón y lo llamaría. El 14 de abril un inspector de la OBE de Morón fue a su casa a informarle que debía ir a pagar el retroactivo, ya modificado: 362 pesos. Lo pagaron, y Tonys analiza: «Comparado con la cifra anterior es una modificación considerable. Pero si analizamos los días de agonía, utilizar vacaciones para todas las gestiones, pedirles a todos que revisaran el caso para no ser injustos, y tener que pagar por algo que uno no hizo… Para mí es una falta de profesionalidad. Es una lástima que esta sea la cara de esa Empresa, donde hay tantos trabajadores valiosos que nos garantizan día a día el servicio que necesitamos».
Denuncia similar envía Diego Antonio Muñoz, delegado del Poder Popular en la circunscripción 65 del Consejo Vigía-Florat, en la ciudad de Camagüey:
Cuenta que a Berta Carmenates, vecina de calle Pancho Varona 205, en el reparto La Vigía, de la capital provincial, le impusieron una multa de 500 pesos por supuestas irregularidades con el servicio eléctrico en su domicilio. Ella reclamó al Ministerio de Energía y Minas, que decidió crear una comisión investigadora. El 7 de enero se personó en casa de Berta el ingeniero Pedro Suárez Sánchez, quien le entregó el documento que plantea la cancelación de la multa.
Desde entonces, la señora ha solicitado la resolución establecida en estos casos para que le reintegren el dinero en la Oficina de Cobro de Multas. No lo ha logrado. Incluso, en febrero le fue retirado el servicio eléctrico sin encontrarse en la casa, después de haber recibido el documento que le da la razón. En abril se presentó de nuevo un funcionario de la OBE a retirar el servicio, acción que no realizó al mostrarle Berta el documento.
Esta situación es de conocimiento del director de la Empresa Eléctrica provincial, del Director de la OBE municipal y del Presidente de la Asamblea Municipal del Poder Popular en Camagüey. Y Berta sigue esperando…