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Durante cuatro días, jóvenes de más de 50 países intercambiaron experiencias en La Habana. Autor: Calixto N. Llanes Publicado: 21/09/2017 | 06:21 pm
La Unión de Jóvenes Comunistas (UJC) de Cuba fue ratificada como secretaria general de la Federación Mundial de Juventudes Democráticas (FMJD), durante la XIX Asamblea General de esa organización, que se desarrolló durante cuatro días en La Habana, con la participación de más de 150 jóvenes que representan 80 organizaciones de 51 países.
La noticia se conoció en la jornada final del evento, que sesionó este jueves en la escuela Salvador Allende, y donde además se anunció que la Organización de la Juventud Comunista de Chipre seguirá al frente de la Federación desde su presidencia. De ambas agrupaciones reelectas se distinguió la labor desarrollada a favor de los reclamos históricos de las juventudes democráticas.
Al dar lectura a un resumen de la Declaración Política de esta cita, Nicolás Papademetriou, presidente de la FMJD, expresó que en ella se ratificó el carácter antiimperialista y solidario por el cual se fundó la Federación hace 70 años. Igualmente reafirmó su compromiso en la lucha por la paz mundial, sobre todo en una época de grandes peligros para la humanidad, que obligan a aprovechar las potencialidades que ella misma tiene.
Vamos a seguir adelante ampliando nuestra responsabilidad de desarrollar siempre la unidad entre los jóvenes que están de acuerdo en derrotar al imperialismo, pues la prosperidad y felicidad no puede ser encontrada dentro de ese sistema injusto, expresó el texto, que llamó a las nuevas generaciones a luchar por un mundo de transformaciones sociales.
Acompañaron a los jóvenes en el acto de clausura de esta XIX Asamblea General José Ramón Balaguer Cabrera, miembro del Secretariado del Comité Central del Partido y jefe de su departamento de Relaciones Internacionales; Yuniasky Crespo Baquero, primera secretaria del Comité Nacional de la UJC; Soraya Álvarez Nuñez, directora general de la Asociación Cubana de las Naciones Unidas, así como otros invitados.
Luego de esa jornada, en la tarde noche parecía que un Festival Mundial de la Juventud y los Estudiantes regresaba a La Habana como sucedió en 1978 y 1997, cuando fue sede de ese evento. A esa hora, el área capitalina de La Piragua hacía gala de los más hermosos bolsos, bufandas, jarrones, abanicos, trajes, platos y bailes típicos de Angola, Jamaica, Viet Nam, Perú, Srilanka… en la Feria de las Nacionalidades, que unió a jóvenes cubanos con otros que estudian en la Mayor de las Antillas, desde varios países.
Mientras las culturas y las costumbres del mundo se mezclaban en esa fiesta, el popular dúo de música Buena Fe, protagonizaba el concierto Juventud unida por la paz. Culminaban así las jornadas de debate, reflexión y pensamiento que vivieron las juventudes progresistas del mundo en busca de una mejor Federación y en su apuesta por la integración, como un ejército consciente que se levanta contra las injusticias.
