TOKIO, enero 12.— Japón dio marcha atrás el viernes respecto a las sanciones recomendadas por Estados Unidos para prohibir las ventas de petróleo iraní, expresando reservas ante medidas que a su entender podrían causar un fuerte aumento del precio del crudo y perjudicar a la economía mundial, reportó AFP.
«Estados Unidos quiere adoptar sanciones. Nosotros consideramos que hay que ser extremadamente circunspectos para aceptar semejantes medidas», dijo el ministro japonés de Relaciones Exteriores, Koichiro Gemba, después de reunirse con su homólogo francés, Alain Juppé.
Estas declaraciones contradicen las afirmaciones del ministro japonés de Finanzas, Jun Azumi, quien el jueves sostuvo que Tokio va a «adoptar lo antes posible medidas concretas y planificadas» para reducir todavía más la parte iraní de sus importaciones de petróleo.
Este anuncio, realizado después de una reunión con el secretario estadounidense del Tesoro, Timothy Geithner, fue considerado como un apoyo japonés a las tesis norteamericanas y una victoria de la diplomacia de Estados Unidos, después de una clara negativa de China.
Gemba advirtió del riesgo de provocar un aumento en los precios del petróleo al presionar demasiado a Teherán, una preocupación que a Juppé le pareció innecesaria, informó la agencia de noticias Kyodo News, citada por XINUA.