Mustafa Abdel Jalil (derecha), jefe del CNT saluda a Anders Fogh Rasmussen, secretario general de la OTAN. Autor: Getty Images Publicado: 21/09/2017 | 05:14 pm
TRÍPOLI, octubre 31.— El jefe de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), Anders Fogh Rasmussen, arribó este lunes a esta capital, en una visita sorpresa en el cierre formal de la misión aérea de la Alianza Atlántica, convertida en agresión que desempeñó un papel fundamental en la caída del régimen de Muammar al-Gaddafi.
Según AFP, Rasmussen, quien llegó a Trípoli a bordo de un avión de transporte militar Hércules C130 escoltado por dos cazas Mirage franceses, se reunió con dirigentes del autoproclamado Consejo Nacional de Transición (CNT), agrupación utilizada por las potencias extranjeras como máscara de su guerra contra Gaddafi.
Se trata de la primera visita a Libia de un secretario general de la OTAN, apuntó el despacho.
La operación Protector Unificado duró siete meses, con acciones militares en el Mar Mediterráneo y el espacio aéreo del país norteafricano, y fue decisiva para la caída del Gobierno. No obstante, analistas sopesan si el hecho de concluir la misión aérea significará que la OTAN se desentienda del futuro libio.
El cese formal de la agresión de la OTAN obedeció a un acuerdo unánime adoptado el jueves último por el Consejo de Seguridad de la ONU, el mismo órgano que avaló en marzo la imposición de una zona de exclusión aérea con el alegado fin de proteger a civiles.
La OTAN deja un país sumido en la ruina y con grandes retos en materia de seguridad, reconciliación y reconstrucción de infraestructuras.
En declaraciones a la prensa, Rasmussen, no obstante, se vanaglorió de la «misión cumplida», que describió como de «gran éxito», y dijo estar «orgulloso del rol desempeñado por la OTAN», causante de una cifra elevada pero indeterminada de muertos y heridos, sobre todo civiles, indicó PL. Asimismo, omitió alusiones a los bombardeos contra zonas residenciales e instalaciones gubernamentales civiles, y trató de limpiar la imagen del conglomerado al asegurar que «evitamos la matanza de la población libia».
En tanto, el Consejo de Seguridad subrayó su preocupación por la proliferación de armamento, y llamó a las autoridades a cumplir sus responsabilidades en materia de control y desarme. En una resolución aprobada este lunes por sus 15 miembros, el órgano de la ONU reclamó la adopción de todas las medidas necesarias en esa materia, con énfasis en la destrucción de armas químicas que, según el CNT, fueron encontradas en un sitio no especificado de Libia.
Mientras, el CNT eligió al ingeniero Abdul Rahim El-Keeb como primer ministro interino para un gobierno aún inexistente. Según informaron medios noticiosos en Trípoli, El-Keeb obtuvo 26 de los 51 votos posibles de la agrupación, lo cual puso de relieve las divergencias existentes en el liderazgo de la insurrección contra Gaddafi, apoyada por la OTAN.