LISBOA, marzo 2.— Las Fuerzas Armadas de Guinea Bissau aseguraron este lunes que respetarán al poder político y las instituciones, después del asesinato del presidente Joao Bernardo Vieira y del jefe del estado mayor en sendos atentados.
En un comunicado, firmado por el estado mayor de las Fuerzas Armadas, los militares garantizaron que la institución armada obedecerá al poder político y llamaron a la población a mantener la calma.
Por su parte, el Consejo de Ministros de Guinea Bissau instó al Procurador General de la República a crear una comisión que investigue los atentados separados en que murieron el mandatario y el general Tagme Na Waié, informó la agencia de noticias LUSA citada por PL.
En Bissau, la capital, donde imperaba la calma, el gobierno decretó siete días de duelo nacional e informó que Isabel Vieira, la esposa del presidente asesinado, se encuentra en lugar seguro.
La canciller guineana, María Adiato D jalo Nanadigna, condujo este lunes una reunión con todas las representaciones diplomáticas asentadas en esta nación donde lamentó los asesinatos de esas figuras que —dijo— combatieron por la independencia y la soberanía de Guinea Bissau y trabajaban por la estabilidad y la paz nacional.
Agregó que se creará un comité de investigación para esclarecer las muertes de las dos personalidades, cuyos autores, apuntó, aún no han identificado, continuó PL.
Según la Constitución, el presidente de la Asamblea Nacional Raimundo Perreira debe asumir el cargo de forma interina y convocar elecciones presidenciales en 60 días.
Tras conocerse la muerte de Joao Bernardo Vieira, Portugal, la antigua metrópoli, condenó el asesinato y convocó una reunión de urgencia de la Comunidad de Países de Lengua Portuguesa, donde se decidió el envío inmediato al país africano de una delegación encabezada por el secretario de Estado portugués para la Cooperación, Joao Gomes Cravinho.
Al mediodía de este lunes, el gobierno guineano transmitió por la radio estatal la información sobre las muertes, en circunstancias aún no establecidas, del presidente Vieira y del jefe de Estado Mayor, Batista Tagme Na Waié.
La agencia LUSA dio cuenta de versiones sobre un asalto realizado este lunes por un grupo de militares contra las antiguas instalaciones de la policía judicial en la capital de esa ex colonia portuguesa.
En la acción fueron liberados un grupo de soldados que guardaban prisión por participar en un ataque contra el ahora fallecido presidente en noviembre del año pasado.
También informó que las fronteras marítimas, terrestres y aéreas de Guinea Bissau con Senegal y la República de Guinea fueron cerradas por los militares hasta nueva orden. La muerte de Vieira y del jefe militar levantó una ola de condenas en diferentes países, entre ellos los gobiernos de Brasil y Angola.
El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, calificó de «inaceptable» el asesinato de su homólogo de Guinea Bissau y consideró el magnicidio como un atentado a la democracia de ese país africano, dijo EFE.
Por su parte, reporta PL, el gobierno angolano, en un comunicado, afirmó que este se suma a otros crímenes cometidos en tiempo reciente en esa pequeña nación de África occidental y que solo consigue agravar más las difíciles condiciones de vida del pueblo.
Igualmente, el titular de la Comisión de la Unión Africana, Jean Ping, repudió el acto criminal. Esta organización regional prevé celebrar este martes una reunión extraordinaria de su consejo de paz y de seguridad.
Por su parte, la Comunidad Económica de los Estados de África Occidental (CEDEAO) anunció que enviará una delegación de ministros de Exteriores a Guinea Bissau tras la crisis precipitada por los asesinatos. La delegación incluirá a los cancilleres de Burkina Faso, Cabo Verde, Gambia, Nigeria y Senegal.
También rechazó la acción el jefe del gobierno de Cabo Verde, José Maria Neves, quien pidió el apoyo de la comunidad internacional para la realización de elecciones presidenciales dentro de 60 días en Guinea Bissau.