Organizadores del I Congreso Extraordinario del PSUV ultiman detalles para dar inicio al evento Autor: Yander Zamora Publicado: 21/09/2017 | 04:52 pm
CARACAS.— Se pretende que el debate trascienda más allá del Partido, y los 772 delegados y delegadas al I Congreso Extraordinario del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) están ya dispuestos a iniciar este sábado una jornada de trascendencia histórica, y también inédita, en el hasta ahora tradicional proceder de las agrupaciones políticas de este país.
Aunque la génesis tiene data anterior, lo ocurrido a lo largo y ancho de la diversa geografía venezolana el pasado domingo marcó la diferencia, y el debate sobre la nueva realidad social, que se extenderá hasta el primer trimestre de 2010, prosigue esa ruta nueva, cuya dirección marca al socialismo.
El domingo 15 de noviembre, los patrulleros del PSUV debidamente inscritos fueron a votar por cientos de miles para elegir a estos 772 delegados, voceros de sus criterios sobre cómo construir el socialismo del siglo XXI, a la venezolana, porque emana de condiciones económicas, sociales, culturales y políticas propias. Y fue bien distinta la acción, porque en los partidos tradicionales, la élite que los encabeza o dirige se autonombra sin que sus bases militantes —si las tienen— emitan tan siquiera una opinión sobre quién debiera representarlos.
La democracia participativa que caracteriza al proceso bolivariano tuvo así expresión también en el contexto de esta vanguardia política, que debe definir estructura, estatutos y paradigmas del PSUV. Por algo el director de la más importante y mayoritaria organización política de Venezuela, Jorge Rodríguez, calificó el proceso como una fiesta, «una actividad maravillosa», y hasta invitó a los múltiples y hasta muchas veces encontrados o enfrentados partidos de la oposición a convocar de igual forma a sus miembros para escoger a candidatos electorales y dirigentes. Todo hace indicar que ninguno podrá responder ese emplazamiento.
La fase iniciada este sábado es igual de inédita. El miércoles, en una reunión con los delegados y delegadas, Hugo Chávez, en su calidad de Presidente de la nación y del PSUV, les alertaba que «es necesario que no se quede el debate dentro del Congreso, debe salir a los barrios, porque ellos son la parte primordial». Además, llamaba a las autoridades de Gobierno a «interactuar de manera intensa en la evaluación de la situación, en las sugerencias, observaciones, recomendaciones; sobre todo, las que vengan de las profundas raíces y el cuerpo popular, de las bases del partido y de la población toda».
Les espera entonces un trabajo intenso y dialéctico, advertía, al explicar que «el Congreso va a ser un evento histórico que tendrá impacto en el acontecer nacional e internacional» y era deber de estos delegados psuvistas «llevarlo al más alto nivel para luego dejar recomendaciones y decisiones, que se deberán poner en acción».
Es obvio que el llamado va mucho más allá del accionar de un partido únicamente para ganar elecciones, se trata de la agrupación de vanguardia para hacer la revolución socialista y con ella un proyecto de país distinto que tiene como premisa hacer realidad los sueños de Simón Bolívar y su causa revolucionaria en las condiciones actuales.
Y este compromiso con el pueblo venezolano se extiende a la América Latina en renovación y despertar de esperanza, y al mundo que busca alternativas al capitalismo.
Venezuela y la Patria Grande esperan un Congreso del PSUV punto de partida para afianzar fortalezas con la unidad, desbrozar debilidades con la consolidación de una conciencia política y virtudes éticas revolucionarias, y enfrentar con firmeza los planes de la contrarrevolución interna e internacional.