«Detengan esa masacre», clamó el presidente Manuel Zelaya, en mensaje a los militares, en especial al general Romeo Vázquez, jefe de las fuerzas que dieron el golpe militar del pasado 28 de junio.
Es lamentable que las fuerzas militares de Honduras repriman a una manifestación pacífica del pueblo que espera recibir a su Presidente y que hoy es el jefe general, el Comandante General de las Fuerzas Armadas, apuntó.
«Siento cada vez la necesidad de llegar a Honduras, tengo que estar junto al pueblo, al frente del pueblo, para detener ese terrible poder que se está apoderando de Honduras».
Quiero llegar para evitar esa represión, cuando yo llegue va a terminar en nombre de Dios, del pueblo, de la justicia que Honduras necesita, para reducir tanto sufrimiento de la población, para que el pueblo tenga libertad, señaló.
Llamó a los soldados para que vuelva la reconciliación y vuelva la paz.
Al advertirle la periodista de TeleSur que en Toncontín había un helicóptero militar sobrevolando para evitar el aterrizaje y un batallón militar para apresarlo, Zelaya afirmó: «Eso no me amedrenta, voy sin armas, a dialogar, como presidente de los hondureños, tienen que respetar la palabra del pueblo, que es la misma palabra de Dios».
Quiero hablar especialmente al general Romeo Vázquez, no destruya a su pueblo ni a su familia, el pueblo está en las calles, no pueden gobernar, tienen el rechazo de todo el planeta tierra.
Retenga esas tropas, retenga esa masacre, se lo pido como amigo, en el nombre de Dios, enfatizó.
Casi de inmediato nuevos disparos se escuchaban en las inmediaciones del aeropuerto de Toncontín.