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LA HABANA, mayo 18.— El coreógrafo estadounidense Pedro Ruiz ajusta hoy los detalles finales del montaje de un ballet con música compuesta por el laureado pianista cubano Frank Fernández, informa PL.
La coreografía tendrá su estreno mundial en el Teatro Martí de esta capital el próximo 24 de mayo y adoptará el título de un libro de la coleccionista de arte e investigadora estadounidense, Madeleine Plonsker, The light in Cuban eyes.
El libro compila una serie de imágenes de jóvenes fotógrafos del país caribeño y será presentado ese día en coordinación con la Fototeca de Cuba.
Una selección de estudiantes de la Escuela Nacional de Ballet Fernando Alonso protagonizan la pieza danzaria, creada en esta fecha para vincularla al principal evento de las artes plásticas en Cuba, La Bienal de La Habana.
Como otras obras de Ruiz, esta presenta momentos que son auténticos cuadros e imbrica la plasticidad de la danza con los ritmos afrocubanos.
El creador no renunció a la técnica clásica ni en los pasajes musicales que evocan el sincretismo racial propio de América, casi siempre asociado a un estilo de danza más folclórica, pero su mérito radica en haberlo defendido con éxito pues la coreografía llena cada compás.
Muchachos dejen que la poesía esté presente en todo, no quiero movimientos vacíos, indicó el coreógrafo a los bailarines, muchos de ellos recientemente premiados en un concurso internacional.
A Ruiz le interesa la buena técnica y de hecho concatenó pasos complejos y partneos fuera de eje y con desplazamientos a una velocidad poco usual en las obras clásicas, que son las más comunes en el repertorio del ballet cubano.
La dinámica de la coreografía exige una forma diferente de respirar y de usar la técnica clásica sobre una música muy cubana, comentó el coreógrafo a Prensa Latina y de esta manera expuso la mayor novedad del espectáculo dividido en tres movimientos.
