Las entradas al agua de Guerra y Aguirre resultaron «mal vistas» por los encargados de impartir justicia. Autor: Ricardo López Hevia Publicado: 21/09/2017 | 05:26 pm
Al parecer las pastillas contra el vértigo no les están haciendo efecto. Otro tercer lugar entre solo tres participantes, aunque supuso el metal bronceado, deja mucho que desear, mas, algo es algo, dirían por ahí. En definitiva, los cubanos José Antonio Guerra y Jeinkler Aguirre salieron bien mojados de Moscú este viernes, durante la cuarta etapa de la Serie Mundial de Clavados, pero la superioridad de sus rivales y significativas deficiencias en el entrenamiento de los criollos dejaron atascada la maquinaria.
El evento sincronizado a diez metros del agua solo les reservó 387,30 puntos, en una prueba con nombres y apellidos. En efecto, los favoritos chinos Aisen Chen y Yue Lin compilaron 471,18 en la piscina olímpica de Moscú, para llevarse el tercer oro en tres presentaciones. Casi nada.
En la anterior parada, con asiento en Edimburgo, Gran Bretaña, los asiáticos se habían ausentado, tal vez a sabiendas de que un descansito no viene mal, sobre todo si alardean con el cartel de «los reyes del momento».
Como les decía, tres duplas ¿animaron? el concurso, y claro, ninguna se quedaría sin preseas —no imagino la emoción del público presente—. Los rusos Víctor Minibaev y Artem Chesakov negociaron fácilmente el metal plateado, merced a 426,45 unidades.
Las calificaciones confirman la poca exactitud de nuestros muchachos en la ejecución de los saltos cinco y seis, los más pobres del día y premiados con apenas 57,42 y 68,04 rayitas. A modo de balance les cuento que los europeos redondearon 75,60 y 88,56 en esos intentos, por debajo de los muchachos de ojos rasgados, dueños de 84,36 y 93,96.
En sentido general las entradas al agua de Guerra y Aguirre resultaron «mal vistas» por los encargados de impartir justicia, pues solo un brinco, el tercero, no terminó en el saco de lo peor de la liza. Igualmente, sus dos últimos saltos fueron los de más baja puntuación en los cuatro capítulos rodados, con excepción del quinto de la segunda parada, penúltimo en Dubai.
Recuerden que en Beijing terminaron a la zaga de una cola con cuatro aspirantes, y el Oriente Medio les reservó el puesto tres entre idéntico número de parejas. Edimburgo los vio aferrar la medalla de plata, pero nuevamente con un trío de binomios en pugna.
Al margen de la falta de engranaje mostrada por los antillanos, alegra su segundo escaño en el ranking de la serie, aunque es cierto que esas 84 unidades no parecen suficiente a falta de dos etapas.
Los rusos, igualmente con asistencia a todas las sedes, amasan 99 puntos y van primeros en el escalafón. Chen y Lin anclan terceros (81) y los aztecas descansan en el sótano (60), aunque ambas combinaciones tienen una presentación menos.