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Estados Unidos y Panamá abrirán mañana las semifinales de la Copa de Oro de fútbol en la ciudad de Houston. En el segundo turno, el favorito conjunto de México se medirá con Honduras.
Los estadounidenses llegaron tambaleándose a los cuartos de final, pero allí reencontraron su juego y eliminaron 2-0 a Jamaica, que había cruzado invicta y con buenas sensaciones la fase preliminar. Mientras, Panamá superó 5-3 a El Salvador en tanda de penaltis, tras igualar 1-1 en el tiempo reglamentario y la prórroga.
En este último choque hubo mucho roce. El Salvador pudo ganar con el penal fallado al minuto 23 por su artillero Rodolfo Zelaya, pero fue Panamá quien tuvo la suerte a su favor y encontró un polémico gol al minuto 90 que cambió la historia.
Así, veremos una revancha del choque de la primera etapa entre panameños y estadounidenses, donde los del istmo ganaron dos goles por uno.
El otro duelo de semifinales pondrá a prueba el favoritismo de México, que arrolló en la fase preliminar pero titubeó en cuartos de final frente a Guatemala, aunque finalmente se impuso 2-1.
Entonces la selección azteca tardó en digerir el gol marcado a los cinco minutos por el veterano guatemalteco Carlos, «Pescadito», Ruiz. Sin embargo, se redimió en el segundo tiempo con anotaciones de Aldo de Nigris (minuto 48) y Javier, «Chicharito», Hernández (66).
Por su parte, Honduras volvió a ganarle a Costa Rica, su archirival en Centroamérica, en otro partido que llegó a la lotería de los penaltis (4-2). Aquí también hubo empate 1-1 durante los 90 minutos de juego y los 30 del alargue.
El delantero Jerry Bengtson, quien marcó el gol de Honduras y además convirtió un penalti, fue el héroe del choque junto con el arquero Noel Valladares. En cambio, Álvaro Saborío falló dos veces por Costa Rica desde el manchón de los 12 pasos y cargó con la cruz de villano.
También hubo duras críticas para el técnico argentino Ricardo La Volpe, timonel de Honduras, quien se defendió echándole la culpa a las injusticias del fútbol. «Fuimos superiores, pero nos faltó contundencia», dijo.
