Del 17 de julio al 1ro. de agosto se celebrarán en Mayagüez, Puerto Rico, los XXI Juegos Deportivos Centroamericanos y del Caribe.
Estos juegos, reconocidos como el evento deportivo multidisciplinario más antiguo del mundo, son parte del ciclo olímpico.
Con el objetivo de participar en ellos más de 2 000 atletas cubanos se han mantenido en los diferentes centros, entrenando muy fuerte con vistas a poder integrar los equipos.
Cuba, que desde la edición de 1970 ha ocupado el primer lugar en los 7 Juegos Centrocaribes en los que ha participado, acumula en su historia un total de 3 071 medallas, de ellas 1 630 de oro, 825 de plata y 616 de bronce e históricamente ha concurrido a estos Juegos con sus mejores atletas y equipos, muestra bien clara del respeto que siente por el deporte y los pueblos hermanos de nuestra región.
Contamos para esta edición, con una fuerte selección, que podría ubicar nuevamente a nuestro país en el primer lugar de Mayagüez 2010.
Las experiencias acumuladas en eventos desarrollados en territorio puertorriqueño no han sido buenas.
Los integrantes de las delegaciones que participaron en los Juegos Centroamericanos y del Caribe, San Juan 1966, Ponce 1993 y la etapa clasificatoria del I Clásico Mundial del año 2006, aún recuerdan con justo desagrado, las constantes agresiones, provocaciones e insultos y presión permanente a la que se vieron sometidos, por grupos de contrarrevolucionarios cubanos que actúan de manera impune y han hecho del terrorismo, la intolerancia y el fascismo en su versión norteamericana, un modo de vida bien pagado y auspiciado por las diversas administraciones estadounidenses.
La sede le fue otorgada a Mayagüez, en la Asamblea General Extraordinaria de la ODECABE que se efectuó en La Habana en mayo del año 2004. La votación fue de 22 votos a favor y 16 en contra.
Cuba, en esa propia asamblea, expresó claramente la posición de nuestro país, sus reclamos y las obligaciones que contraían la ODECABE y Puerto Rico.
Desde el mismo año 2004, hemos venido alertando a las autoridades del Comité Organizador de los Juegos, a la Organización Deportiva Centroamericana y del Caribe (ODECABE) y al Comité Olímpico de Puerto Rico (COPUR), que los XXI Juegos a celebrarse en la ciudad de Mayagüez debían cumplir cabalmente lo establecido por los reglamentos para este tipo de competencia y que Cuba no aceptaría ningún tipo de trato discriminatorio.
Un ejemplo de lo afirmado, solo en el período de octubre del 2007 a febrero del 2010, se efectuaron más de 45 reuniones, encuentros, llamadas o intercambios de correspondencia entre el Comité Olímpico Cubano y las autoridades deportivas puertorriqueñas y de la Organización Deportiva Centroamericana y del Caribe (ODECABE), todos dirigidos a precisar con claridad las posiciones de Cuba y su voluntad de participar en los Juegos, si se cumplían con nuestros justos reclamos.
Los reclamos de Cuba fueron:
- Visado a toda su delegación, partir de lo establecido en el Estatuto de la ODECABE, permiso de aterrizaje en un aeropuerto apropiado del territorio puertorriqueño y la seguridad de que no serían confiscados los aviones de la línea aérea Cubana de Aviación que utilizaríamos, así como garantías para la entrada y salida de los implementos y demás equipamiento necesario para la lid.
- Que las condiciones de alojamiento, transportación interna y otras facilidades fueran las mismas que las asignadas al resto de las delegaciones, y se permitiera el acceso de la prensa y otros integrantes del grupo de apoyo también existente en las otras embajadas atléticas.
- Que se implantaran condiciones de seguridad y tranquilidad, evitando presiones y provocaciones.
Además, que Cuba tampoco admitiría bajo ningún concepto, que la delegación cuando llegara a Puerto Rico fuera sometida a tratamientos reservados para los ciudadanos de países considerados terroristas. El gobierno de los Estados Unidos nos ha dado ese status de manera arbitraria; el movimiento deportivo cubano expresó oportunamente su total respaldo a la declaración que nuestro Ministerio de Relaciones Exteriores realizó rechazando de manera enérgica esa agresión del imperio.
Cuando exigimos visa para todos los miembros de la delegación, nos basamos en el Estatuto de la ODECABE, entidad que convoca a los Juegos, que establece en su Capítulo X, Artículo 40, lo siguiente:
“ …el Comité Olímpico Nacional que aspire a celebrar los Juegos deberá entregar una declaración oficial del gobierno de su país y de su ciudad en que se manifieste se aceptan la responsabilidad de la realización de los Juegos y que el Gobierno Central se obliga a otorgar la entrada al país con la TARJETA DE IDENTIDAD CENTROAMERICANA Y DEL CARIBE (TIC) y un pasaporte vigente….”
Ese compromiso legal se está pisoteando.
El Estatuto, como se sabe, regula el funcionamiento de la entidad frente a terceros y establece los derechos y obligaciones de los miembros y las relaciones entre estos.
Permitir que se violen es propiciar el resquebrajamiento jurídico de la organización y el debilitamiento de la misma.
Agradecemos la disposición de las autoridades deportivas puertorriqueñas, de costear vuelos charter de aviones no cubanos para que la delegación nuestra viaje a los Juegos. Es un gesto elegante, pero no podemos aceptarlo.
Nosotros exigimos reiteradamente viajar a Puerto Rico, como miembros de la ODECABE, con todos los derechos.
Somos un país de atletas dignos, combativos y verdaderos patriotas que no tienen que esconderse para asistir a una cita en la que son protagonistas, o como gente no deseada necesitada de acceder por el patio trasero, ocultando su origen.
Estamos orgullosos de nuestra bandera y de nuestro pueblo, y en consecuencia con ello no aceptamos tal vejamen.
Cuba solo ha estado exigiendo sus derechos como país miembro de la ODECABE; cualquier sede de unos Juegos Centroamericanos y del Caribe los hubiera garantizado sin dificultad alguna.
Mayagüez, sin embargo, aunque ha querido, no ha podido asegurar esas condiciones, Puerto Rico, en su condición de Estado Libre Asociado depende del gobierno de los Estados Unidos de América y está regido por las leyes federales estadounidenses.
Hemos reconocido públicamente, los permanentes y denodados esfuerzos realizados por las autoridades deportivas puertorriqueñas y su pueblo, pero la respuesta brindada por el gobierno estadounidense a sus múltiples gestiones han sido el silencio o la emisión de documentos escritos en términos totalmente ambiguos, muy a tono por cierto con el estilo actual de la diplomacia norteamericana, en ellos no aparece ninguna respuesta a las solicitudes de nuestro país.
Se ha tenido por la parte cubana, paciencia, ética y voluntad de cooperar en la erradicación de trabas y obstáculos y lograr participar junto a nuestros hermanos de Centroamérica y el Caribe en los XXI Juegos, pero han transcurrido meses y años sin obtener respuestas.
El tiempo de espera razonable, después de cuatro prórrogas concedidas por el movimiento deportivo cubano a los organizadores de Mayagüez 2010, se agotó.
El Comité Olímpico Cubano y el Instituto Nacional de Deportes, Educación Física y Recreación, después de evaluar detenidamente cada paso dado y la posición asumida nuevamente por el gobierno norteamericano de obstaculizar y no acceder a justas solicitudes, han decidido dar a conocer de manera oficial que Cuba no participará en los Juegos Centroamericanos y del Caribe, Mayagüez 2010.
El Comité Olímpico Internacional, los Comités Olímpicos Nacionales, las instituciones, organizaciones y federaciones deportivas, así como la comunidad mundial deben tomar nota de lo acontecido y evaluar hasta qué punto se puede continuar otorgando sedes de eventos a un país que de su política exterior y de su diplomacia, hacen elementos agresivos y violatorios del derecho internacional.
Ciudad de la Habana
26 de febrero, 2010.
Comité Olímpico Cubano
Instituto Nacional de Deportes, Educación Física y Recreación.