Serie Quijote y Sancho. Autor: Juventud Rebelde Publicado: 21/09/2017 | 05:07 pm
Leyendo en el Diccionario Panhispánico de Dudas sobre algo de lo que he hablado no sé cuántas veces, y que creía que no tenía ya ningún secreto para mí, he encontrado lo más sorprendente que puedas imaginar.
Siempre he dicho, y aparece así en todos los libros acerca de la materia, que delante de las palabras que comienzan con a tónica, incluso en el caso de que esta vaya precedida de una hache, debemos utilizar «el» y no «la». El agua, el aula, el habla, el águila. Hasta aquí todo iba bien, ¿sí?
Pues lean esto conmigo: «… pero no se considera incorrecto, aunque en la lengua actual es muy poco frecuente, utilizar en estos casos, la forma plena “una”, “uno”: una águila, veintiuna hachas…». Estuve a punto de un terepe. Con perdón de los académicos, y hablando como los jóvenes: ¡Que me coja yo diciendo «una asma»!
Ya que tratamos de estas cuestiones, recuerda: Nada de «El treinta y un por ciento», sino «El treinta y uno por ciento».
Cuando se dice: «No tiene desperdicio», se está hablando de algo que resulta totalmente válido o provechoso. Frecuentemente se utiliza con intención ponderativa o irónica. Si alguien nos cae muy bien, si posee valores notables, decimos: Fulano no tiene desperdicio. Si el libro que acabamos de leer nos apasiona, lo recomendamos de esta misma manera: No tiene desperdicio. La frase aparece registrada en los diccionarios; un lector imaginaba que se trataba de un regionalismo nuestro.
Y hablando de regionalismos, oí una simpática expresión que se usa en la provincia de Granma. Bueno, al menos eso me aseguró una granmense. Dice que tras un almuerzo sabroso y abundante, por allá se dice: «¡Qué llena’íta!» Es una manera originalísima de celebrar lo que hemos comido. Por supuesto, pertenece al lenguaje familiar.
Para algunos, encarecer, encarnecer, escarnecer y encarnizar, se prestan a confusión. Veamos el significado de cada uno: Encarecer significa ‘aumentar de precio, ponderar o alabar mucho algo’. Se conjuga como agradecer. Encarnecer también como agradecer, es de uso poco frecuente, quiere decir: ‘engordar’. Escarnecer es ‘burlarse’. Encarnizar, encarnizarse, ‘comportarse con crueldad’.