Como todo gran acontecimiento, la X Bienal de La Habana ya tiene en tensión todas sus fuerzas, y la capital cubana es un hervidero en vísperas de una gran eclosión del arte contemporáneo más emergente, reporta la Agencia de Información Nacional.
Porque además de esta fiesta del color y las formas, la ciudad, calificada la mayor galería del mundo a cielo abierto, celebra el cuarto de siglo de una bienal que apuesta por la creatividad de los artistas marginados de los grandes circuitos del mercado del arte.
A sus sedes principales ya las alumbran las luces de la creación y se alistan los últimos detalles para la inauguración, al filo de las cuatro de la tarde del próximo viernes en la fortaleza de La Cabaña y el castillo de Los Tres Reyes del Morro.
Allí ya está instalado el campamento de los jóvenes integrantes de la brigada Martha Machado, que a iniciativa del artista Alexis Leyva Machado (Kcho) participó en la reconstrucción de los lugares más afectados por el paso de los ciclones por Cuba en 2008.
Mientras, en los espacios expositivos de La Cabaña numerosos creadores cubanos y extranjeros dan los toques finales a sus muestras personales y colectivas, y a los performances que convertirán al recinto en testigo de lo más sorprendente e imaginativo que ronda hoy al universo de las artes visuales.
Algo semejante sucede en los predios del Convento de San Francisco de Asís, sede del proyecto Punto de encuentro , que coordina Kcho y reúne a relevantes artistas de diversas partes del mundo para crear inspirados en los retos más agudos que vive la humanidad.
Por allí ya pasó y dejó su obra el nipón Tatsuo Miyajima, que tuvo que regresar a su patria para continuar sus labores docentes y a quien relevan los brasileños Flaminio Jallageas y Patricia Gerber, y la sudafricana Jane Alexandre.
La Habana se multiplica en cinco circuitos en función de la Bienal, que comprenden el parque Morro Cabaña, La Habana Vieja, Vedado, La Lisa y varios sitios públicos de la urbe.
Pero la gran cita de las artes visuales desborda toda frontera, y más allá de galerías y museos otras muchas locaciones como sedes de instituciones culturales y sociales se aprestan para acoger las obras de 120 artistas cubanos de diversas generaciones y tendencias creativas.
En fin, que oficialmente este gran encuentro cultural comienza el 27 de marzo y se extenderá hasta el 30 de abril, pero desde hace ya varias jornadas la capital cubana respira y se mueve al ritmo de las musas de las artes con el lema de Integración y resistencia en la era global, concluye este medio.