El Gobierno de la República de Cuba decidió retirar a todo el personal de la colaboración no médica que se encuentra prestando sus servicios en Honduras y que, en total, suman 143 personas.
El pasado miércoles 1 de julio, el golpista Enrique Ortez Colindres, dijo que los colaboradores cubanos del sector de la educación estaban participando en labores de adoctrinamiento y organización de grupos de choque, citando como fuente de esta grave aseveración a las Fuerzas Armadas Hondureñas.
Al respecto, la Embajada de la República de Cuba en Honduras emitió una nota oficial en la que informa su rechazo a estas calumnias, «cuyo único objetivo es el de alentar acciones hostiles y violentas contra los colaboradores cubanos, que realizan una labor solidaria, instrumentando un programa de alfabetización que ha beneficiado a más de 150 mil hondureños».
La misión diplomática cubana explica que los 83 pasaportes de asesores educativos cubanos, vinculados al Programa Nacional de Alfabetización, que se encontraban en poder de la Secretaría de Relaciones Internacionales de Honduras para prorrogar su estancia allí, fueron devueltos antes de realizar el trámite.
La Nota aclara que nuestro país mantendrá al personal médico y paramédico en la República de Honduras, teniendo en cuenta que, su misión, destinada a proteger la salud y salvar vidas humanas en cualquier circunstancia, es estrictamente humanitaria. «Este personal permanecerá en el país, a menos que exista una solicitud expresa de que sea retirado», agrega la nota.
De los 143 colaboradores cubanos, 83 se retirarán a través del Aeropuerto de San Pedro Sula, en una aeronave de la empresa Cubana de Aviación, y 60 lo harán por carretera desde la ciudad de Danlí hacia el punto fronterizo de Las Manos en Nicaragua.