Acuse de recibo
El pasado 23 de febrero el septuagenario Roberto Castellón evocaba aquí con nostalgia sus años de salvavidas en Guanabo, balneario que relucía por «el respetuoso ambiente de limpieza y conservación». Castellón, quien es hoy miembro del Grupo de Gestión Ambiental de ese consejo popular, censuró el irrespeto actual por el medio ambiente y las normas higiénico-sanitarias allí: basureros, maniguas indeseables, desechos en las cuencas de los ríos y aguas albañales, entre otros abandonos.
Enumeraba la gran cantidad de ruinas, y de obras construidas a inicios de la Revolución que ya no existen. Y criticaba que el taquillero La Goleta, por años con una capacidad para más de 5 000 personas y cafetería-restaurante, estuviera en plan de demolición.
El 16 de mayo respondió Yanet Angélica Cáceres Manso, vicepresidenta primera del Consejo de la Administración Municipal de La Habana del Este —al cual pertenece Guanabo. Explica que visitó a Castellón, le da la razón y le reconoce «su sentido de pertenencia y responsabilidad».
Lo planteado por él, apunta, «constituye preocupación y ocupación del Gobierno y del Citma, que nos guía y asesora, pues somos el único municipio que cuenta con 11 playas, y Guanabo es una de las más visitadas por la población».
Yanet enumera las acciones que se ejecutan actualmente en Guanabo: una planta desalinizadora de agua y un punto de venta de agua potable; reparación de los drenes de las calles 466, 474 y 484 y mantenimiento de los parques de estar de la 5ta. Avenida. También se acomete el mantenimiento y reparación de las paradas de ómnibus, el asfaltado de la 5ta. Avenida y el bacheo de calle 7ma., así como el bacheo con mezcla fría de algunas calles laterales.
Se suman la conservación y pintura de entidades estatales y viviendas particulares en 5ta. Avenida, la construcción de pasarelas para proteger las dunas, el fortalecimiento de la recogida de desechos sólidos por Comunales y la cooperación de Arentur en la limpieza de las playas, y se intensifica el trabajo conjunto del Gobierno con el Citma provincial.
Manifiesta que, a pesar de las labores de Comunales y Arentur, la gran indisciplina social que existe conspira contra las condiciones higiénicas de la playa. Añade que las direcciones de Planificación Física provincial y municipal están realizando un trabajo de identificación de las ilegalidades en las zonas costeras, con un plan de acción a mediano y largo plazos, encaminado a resolver dichas problemáticas.
En cuanto a las fosas sépticas de las casas que vierten a la playa, afirma que se está haciendo un estudio por parte de Aguas de La Habana para darle alguna solución. Agrega que esas viviendas llevan años ubicadas en área costera y protegida y deben trasladarse de allí. Mas, para ello debe ofertárseles por el Gobierno otras viviendas, con las cuales no se cuenta por el momento.
Yanet Angélica nos hizo llegar también la opinión escrita de Castellón luego del encuentro: «Estoy muy satisfecho con la compañera y sus planteamientos, ya que es la primera persona del Gobierno que viene a atendernos. Y la invitamos a participar en el Grupo Gestor del Medio Ambiente, a nuestras reuniones, para ver de cerca todas las problemáticas».
En su respuesta, informa también que el taquillero La Goleta será reparado y puesto en funcionamiento para el próximo verano.
A su vez, el 18 de abril pasado, Irene Marité Cárdenas Pérez, directora de la Empresa Provincial de Servicios de La Habana, respondía que el taquillero La Goleta fue entregado a esa entidad por la sucursal extrahotelera Palmares, bajo indicación del Consejo de la Administración Provincial, para reactivar el servicio de taquillas.
Precisa que se presentó al Ministerio de Comercio Interior un proyecto para que fuera aprobado como cooperativa. Y al mismo tiempo se presentó a la Empresa de Servicios para aprobarlo como arrendamiento hasta su definición.
Aclara que dicho local se recibió por la empresa en condiciones de derrumbe, por lo cual se activó solo una parte para el servicio de taquilla, hasta que se defina el proyecto. Y desmintió que La Goleta se encuentre en plan de demolición: «Pasó a nueva forma de gestión en un proyecto, para devolverle el objeto social que tenía».