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CANBERRA, mayo 2.— Políticos australianos calificaron de una bofetada a las autoridades locales las críticas de la Unesco sobre la preservación de la Gran Barrera de Coral.
La senadora Larissa Waters, del Partido Verde, aliado de la coalición gubernamental, dijo que tales censuras ocurren a pesar de que hemos denunciado la falta de previsión al respecto.
Waters llamó a tomar de inmediato las medidas necesarias y coincidió en ese sentido con la opinión de entidades ecologistas y sociales del país.
Según el informe de la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco), la Gran Barrera de Corral está seriamente amenazada y carece de adecuadas políticas de preservación medioambiental.
La Gran Barrera es el mayor sistema de arrecifes del mundo y se extiende por más de dos mil 600 kilómetros frente a las costas del estado australiano de Queensland.
