La Covid-19 ha afectado mucho a la población menor de 20 años en Estados Unidos y a sectores vulnerables Autor: Internet Publicado: 04/08/2020 | 09:10 am
En Estados Unidos, más de 120 personas menores de 21 años murieron por la Covid-19 entre febrero y julio, según un nuevo informe dado a conocer el pasado martes por el Centro de Control de Enfermedades y Prevención (CDC), informó The Hill.
Muchos tenían condiciones de salud subyacentes o eran personas de color. La mayoría de las muertes ocurrieron en personas de entre 14 y 20 años, según el informe; casi la mitad de todas las muertes en ese grupo de edad fueron entre las personas de 18 a 20 años.
Eso podría indicar que los adolescentes y los adultos jóvenes son más propensos a morir de COVID-19 que los niños más pequeños, aunque ambos grupos son, en general, mucho menos propensos a morir que los adultos mayores.
El 75 por ciento de los fallecidos tenía al menos una condición de salud subyacente, incluyendo enfermedades pulmonares crónicas, obesidad, enfermedades neurológicas y del desarrollo, enfermedades cardiovasculares, cáncer, diabetes u otras enfermedades. Sesenta y tres por ciento de los fallecidos fueron hombres.
El informe de los autores señala que las personas de color son más propensas a ser trabajadores esenciales que no pueden laborar desde casa, lo que resulta en un mayor riesgo de exposición a COVID-19, con transmisión potencial a las personas que viven en sus hogares.
Los determinantes sociales de la salud, incluidas las condiciones de vida hacinadas, la inseguridad alimentaria y de la vivienda, las brechas educativas y de riqueza y la discriminación racial, probablemente también contribuyen a las disparidades raciales y étnicas en las muertes por COVID-19, escribieron los autores.
Treinta y nueve de las muertes ocurrieron en el hogar o en el departamento de Emergencias, lo que podría sugerir que las personas están retrasando o aplazando la atención durante la pandemia. «Las personas infectadas o expuestas al SARS-CoV-2 deben ser seguidas de cerca para que el deterioro clínico pueda detectarse a tiempo», destacaron los autores.