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SANTIAGO DE CHILE, junio 1ro.— Veinticinco personas fueron detenidas en la capital, dijo el sitio chileno Ahora Noticias, durante el paro convocado por los estudiantes chilenos y organizaciones sociales para este jueves, jornada durante la cual la presidenta Michelle Bachelet rindió su último informe de gobierno.
La convocatoria tuvo seguimiento, como estaba previsto, en Santiago y Valparaíso pero además se sumaron ciudades como Concepción, donde hubo toma de escuelas.
Los manifestantes mantienen en alto el viejo reclamo de educación pública gratuita, que ha sacado a las calles al estudiantado chileno más de una vez, y otros reclamos sociales.
Medios digitales dijeron que, antes de la Presidenta hiciera uso de la palabra en el Congreso para su última Cuenta Pública, manifestantes colocaron barricadas en calles de la capital y se enfrentaron con la policía y las fuerzas antidisturbios, que empleó carros lanza agua y gases lacrimógenos para disolverlos en diferentes puntos de la capital; mientras que en Valparaíso, un grupo de jóvenes pintó la fachada del edificio de la Armada y también hubo cierre de calles.
Mientras, Bachelet empleaba casi dos horas para rendir su informe, que centró en cinco aspectos fundamentales: educación, economía, protección de personas, mejoras en vida común y los avances en vida política, reportó Telesur.
En materia de educación, la mandataria anunció que la gratuidad de la enseñanza alcanzará el año próximo al 60 por ciento de los estudiantes más vulnerables, en los niveles superior, técnico y profesional.
Pero diputados como Camila Vallejo, exlíder estudiantil y hoy militante comunista, comentaron valorar en toda su dimensión la medida, aunque no cumple todavía con las expectativas.
Según la Jefa de Estado, en los próximos meses «esperamos aprobar el nuevo sistema de educación superior que se tramita ante este Congreso, consagrando, por ley, la gratuidad».
En cuanto a la reforma a la Constitución, que fue uno de sus principales compromisos de campaña, Bachelet dijo que el nuevo texto será enviado por ella al legislativo antes de fin de año, y aseguró que recogerá «toda la diversidad de voces que habitan en nuestra tierra», señaló el reporte.
Se trata de la misma Carta Magna impuesta por el dictador Augusto Pinochet en 1981 y, según Telesur, a pesar de los avances obtenidos en el Congreso con respeto a su reforma, la percepción de la mayoría del pueblo chileno es que aún se está lejos de romper con el texto surgido en dictadura.
En declaraciones a CNN antes de las marchas de este jueves, Daniel Andrade, vocero de la Confederación de Estudiantes de Chile (Confech) —una de las principales convocantes al paro— consideró que el Gobierno de Bachelet ha sido «indolente e injusto».
«No hemos recibido ninguna respuesta favorable. Estamos llamando a paro nacional y nos movilizamos no solo los estudiantes, sino también el movimiento No + AFP y el Colegio de Profesores», aseveró.
