CARACAS, junio 10. — El XIII Consejo Político de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América -Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP) sesiona este martes en Caracas, capital venezolana, con una agenda de debate que incluirá un análisis sobre la injerencia estadounidense en Venezuela, país precursor del bloque integracionista, reporta Telesur.
El Ministerio para Relaciones Exteriores venezolano adelantó que a la reunión asisten los cancilleres de Bolivia, Nicaragua, Ecuador, Dominica, Antigua y Barbuda, Santa Lucia, San Vicente y las Granadinas y Cuba.
También será objeto de debate y análisis la conformación de una zona económica entre el ALBA-TCP y la alianza energética Petrocaribe. Asimismo, los cancilleres aprovecharán la cita para evaluar los preparativos de la conmemoración del décimo aniversario del ALBA, un órgano gestado en el año 2004 por iniciativa del líder de la Revolución cubana, Fidel Castro, y su homólogo venezolano, el comandante Hugo Chávez.
Además, el programa del encuentro también incluye la revisión de la agenda política y social del foro de integración regional, así como el fortalecimiento de la institucionalidad y las acciones dirigidas a estrechar las relaciones comerciales, económicas y de complementariedad productiva entre los Estados parte.
El Consejo Político del ALBA tiene la función de asesorar al Consejo Presidencial en temas políticos estratégicos, presentar propuestas de temas de política internacional para el debate, además de coordinar y orientar el funcionamiento de la Alianza.
Petrocaribe es un mecanismo de integración energética integrado por Antigua y Barbuda, Bahamas, Belice, Cuba, Dominica, Granada, Guyana, Haití, Honduras, Jamaica, Nicaragua, República Dominicana, San Cristóbal y Nieves, San Vicente y las Granadinas, Santa Lucía, Surinam y Venezuela. Días atrás, El Salvador se unió al proyecto.
Hace solo unos días se unió al proyecto energético El Salvador a solicitud del recién electo presidente Salvador Sánchez Cerén.
La nota de la cancillería venezolana destaca que esta iniciativa demuestra la integración de América Latina y el Caribe, no sólo en sus relaciones sociales, sino también en su enfoque de desarrollo sostenido partiendo de un modelo de hermandad, solidaridad y justicia social.