NUEVA YORK, enero 31.— Siria reclamó este martes al Consejo de Seguridad que respalde el diálogo nacional y las reformas políticas puestas en práctica por el Gobierno de ese país, en lugar de exacerbar el conflicto, poco antes de la discusión de un proyecto de resolución presentado por la Liga Árabe con el respaldo de Occidente, que exige la renuncia del presidente Bashar Al-Assad.
El representante de Siria en la ONU, Bashar Jaafari, denunció los intentos dirigidos desde el exterior a engañar a la opinión pública, como sucedió en Iraq, Afganistán y Libia, y exhortó a quienes fomentan la crisis a que reconsideren su posición, reportó PL.
Al hablar en una sesión que debate un proyecto de resolución sobre la situación en la nación mesoriental, Jaafari criticó a la dirección de la Liga Árabe por suspender el trabajo de sus observadores en Siria y su decisión de llevar el problema al Consejo de Seguridad.
También acusó al secretario general de ese organismo regional, Nabil al-Arabi, de presentar ante el órgano de la ONU párrafos seleccionados que parcializan el panorama en detrimento de Damasco.
Instamos al Consejo de Seguridad a apoyar el diálogo nacional y las reformas políticas emprendidas por el Gobierno sirio y a estimular el diálogo para un arreglo de la crisis, insistió Jaafari.
Durante la jornada, Estados Unidos presionó al Consejo de Seguridad para que adopte una resolución de condena clara contra el Gobierno sirio. «Es hora de que la comunidad internacional resuelva sus diferencias y envíe un claro mensaje de apoyo al pueblo sirio», dijo la secretaria de Estado norteamericana, Hillary Clinton, citada por DPA, en alusión a la postura de Rusia y China, que en octubre pasado vetaron una resolución contra Siria.
El primer ministro y canciller qatarí, Hamad bin Jalifa al-Thani, enviado especial de la Liga, instó al Consejo de Seguridad a actuar con decisión en contra del Gobierno de Damasco, del cuál dijo que era como una «máquina de matar». El jeque Al Thani se ha mostrado favorable a crear una fuerza de intervención árabe para Siria.
El secretario general de la Liga, Nabil al-Arabi, pidió al Consejo de Seguridad la rápida adopción de la resolución, que cuenta también con el apoyo de los países de la UE miembros de la máxima instancia internacional.
En tanto, Rusia reiteró como principio que la ONU no debe inmiscuirse en un conflicto interno. «En un momento de extrema crisis política interna el papel de la comunidad internacional no debería ser el de exacerbar las crisis», afirmó el representante ruso, Vitaly Churkin, citado por AFP.
La Cancillería rusa asegura que su país no exigirá el cambio de régimen en Siria y alerta que la resolución que promueven la Liga Árabe y Occidente podría «abrir el camino a una guerra civil».