Mahmoud Ahmadinejad, presidente de la República Islámica de Irán. Autor: Internet Publicado: 21/09/2017 | 05:16 pm
QUITO, enero 12.— El presidente iraní Mahmud Ahmadinejad reiteró este viernes que la acusación de que su país está desarrollando energía nuclear con fines bélicos es una excusa política, poco antes de concluir su visita a Ecuador, última escala de su gira latinoamericana.
Tras una estancia de poco más de 24 horas en Ecuador, Ahmadinejad regresó este viernes a su país. El ministro de Relaciones Exteriores de Ecuador, Ricardo Patiño, le despidió en la base aérea Simón Bolívar de Guayaquil luego de una ceremonia protocolaria, en la que también estuvieron presentes el gobernador provincial de Guayas, Roberto Cuero y autoridades militares, reportó DPA.
«Nosotros no queremos fabricar bombas atómicas contra la humanidad», insistió Ahmadinejad, según PL, y recalcó: «Está claro que los norteamericanos están buscando pretexto para frenar el progreso iraní», reseñó AP.
El mandatario iraní explicó que su país es un problema para Estados Unidos porque se opone a los planes de la potencia norteamericana de dominar el Oriente Medio.
Consultado sobre la posibilidad de una guerra entre Estados Unidos e Irán, Ahmadinejad dijo que espera se impongan algunas personas razonables en ese país. Sin embargo, advirtió que si Washington quiere «dañar y golpear» a su pueblo, Teherán responderá firmemente.
Según PL, el Jefe de Estado señaló que su pueblo es presionado, insultado y calumniado, pero la comunidad internacional debe saber que las potencias hegemónicas no aguantan el progreso y desarrollo de los pueblos, ni su independencia.
Expuso cómo el Gobierno de su país fue derribado con un golpe de Estado, tras el cual fue impuesto un régimen dictatorial por más de 25 años, apoyado por Estados Unidos, sin que a nadie le importaran los derechos humanos de los iraníes, hasta que su pueblo se liberó.
Desde entonces, recordó, Irán ha realizado por lo menos 30 elecciones libres y la hostilidad se ha reforzado después de la victoria, mientras otros países ni siquiera han realizado una votación a lo largo de su historia, pero son apoyados incondicionalmente.
Ahmadinejad llegó a Ecuador procedente de Cuba, acompañado de una delegación de alto nivel de su país, como parte de una gira que lo llevó primero a Venezuela y luego a Nicaragua, para reforzar los vínculos con los países de la región.