La música sobrepasaba los límites y no era necesario un equipo especializado para comprobarlo. La cama vibraba, incluso las almohadas. Era imposible ver la televisión. Mas todo eso habría sido poco o nada importante si la propuesta hubiese tenido calidad. Pero su paciencia tenía límites y no soportaba más continuar escuchando que el sujeto era marca mandarina y que le dolía luego esta o aquella parte del cuerpo.
En esta semana he logrado que me devuelvan en los mercados agropecuarios un total de 530 pesos, y para recuperar esa suma de dinero fue preciso que por suerte llevara una pesa portátil.
Los Juegos Olímpicos —como era de esperar— han traído a nuestras pantallas un derroche de talento y excelencia, historias inéditas de hombres y mujeres cuyo sacrificio les mereció una posición en los más altos renglones de cada disciplina deportiva.
¿Se puede obstaculizar la transmisión de resultados?
Cuba es su gente, más allá de esa imagen allende fronteras que nos traduce en tabaco y ron. Puede un cubano distinguirse en cualquier país del mundo por su frescura, el desenvolvimiento y esa capacidad de creerse originario del centro del universo, aun cuando sepamos que nuestro archipiélago es apenas un punto en la geografía mundial.
El mundo está otra vez a la expectativa de un nuevo choque militar entre Irán e Israel, capaz de desatar una expansión de la guerra en Gaza a la región de Oriente Medio, con repercusión en todo el planeta.
HyperNormalisation (2016), documental de culto del cineasta británico Adam Curtis, sostiene que los gobiernos, los financieros y los utópicos tecnológicos han renunciado al intento de modelar el complejo «mundo real» y, en su lugar, han establecid...
La televisión transmitía en vivo los sucesos. Era el 5 de agosto de 1994: un verano cargante, de calor y carencias. Aunque los apagones se habían nivelado un tanto, en la conciencia pesaban los puñetazos de las 12 y hasta casi 24 horas de apagones diarios; la paralización completa del transporte; la falta de alimentos, de prácticamente todo.