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Anthony Fauci pronosticó la fecha en que el coronavirus se supone que debería estar controlado en Estados Unidos Autor: Reuters Publicado: 24/08/2021 | 10:02 am
WASHINGTON, agosto 24.- El presidente Joe Biden acaba de recibir una noticia profundamente desagradable: la pandemia por la que fue elegido para ponerle fin podría prolongarse hasta bien entrado el año de elecciones intermedias, con toda la destrucción política y económica que eso podría traer, comenta la cadena CNN.
La advertencia del principal experto en enfermedades infecciosas del gobierno, el doctor Anthony Fauci, de que la crisis no estará bajo control hasta la primavera del próximo año e incluso entonces, necesitará que la mayoría de los estadounidenses escépticos sobre las vacunas cambien de opinión, llegó como una fuerte sacudida para la Casa Blanca.
También significa que los planes mejor trazados de Biden de triunfar sobre la pandemia y montarse en una ola económica para la campaña de las elecciones al Congreso en noviembre del próximo año ahora parecen estar en riesgo. Una pandemia que se extiende a lo largo de otro invierno sombrío y más allá corre el riesgo de desacelerar la recuperación económica en la que Biden se basa para su desempeño administrativo, señala la fuente.
Podría desmoralizar a la gente y desencadenar el mal humor entre el electorado. Los índices de aprobación personal del presidente y la confianza de la gente en su manejo de la pandemia ya han disminuido, según encuestas de NBC y CBS.
La declaración parcial de victoria de Biden sobre el virus el 4 de julio último parece muy prematura, al igual que las anteriores relajaciones de la guía de la máscara de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades.
El aumento en los casos de COVID-19 que ha afectado a muchas áreas del país ya ha convertido lo que se vendió como un verano libre del virus en una repetición de algunas de las peores partes de la pandemia a medida que los hospitales de todo el sur son invadidos por pacientes.
Si la emergencia dura tanto tiempo, ofrecerá una oportunidad para los republicanos que buscan calificar la presidencia de Biden como un fracaso, y que están aprovechando su caótica evacuación de Afganistán para pintar una narrativa más amplia de decadencia política.
La última oleada del virus, impulsada por la variante delta, más infecciosa, pudo afianzarse porque los estadounidenses en estados sureños conservadores rechazaron vacunarse en mayor número que sus compatriotas más liberales, indica la CNN.
