Aún quedan 170 detenidos en la base naval. Autor: Reuters Publicado: 21/09/2017 | 05:08 pm
MADRID, abril 25.— Nuevos documentos aportados por Wikileaks y publicados este lunes revelan cómo decenas de inocentes —incluidos ancianos y niños— fueron detenidos durante años en la cárcel que mantiene EE.UU en el territorio ilegalmente ocupado por la base naval de Guantánamo, en tanto liberó prisioneros de «alto riesgo».
Los 759 informes secretos filtrados por Wikileaks, fechados entre febrero de 2002 y enero de 2009, fueron revelados de manera simultánea por varios medios estadounidenses y europeos, entre ellos The New York Times, The Washington Post, la Radio Pública Nacional, The Guardian, The Daily Telegraph, El País, Le Monde, Der Spiegel y La Repubblica.
Los archivos confirman que el 60 por ciento de los reos llevados a esa prisión, ubicada en la base de EE.UU., no tenían ningún vínculo con la yihad (guerra santa).
Los rotativos usados para las revelaciones coinciden en que el principal motivo para apresarlos era el intento de obtener información de ellos, si bien solo el 22 por ciento de los 800 presos que pasaron por la base proporcionó información valiosa a los servicios de inteligencia estadounidenses, dijo DPA. En esa ilegal prisión aún quedan detenidas 170 personas.
De acuerdo con las informaciones proporcionadas por Wikileaks, los prisioneros son clasificados según el valor que tienen para los servicios de inteligencia, y la amenaza que se les atribuía era alta, media o baja.
ANSA destaca que específicamente el periódico Daily Telegraph afirma que entre los prisioneros había 150 inocentes, junto a otros clasificados por Washington como «algunos de los terroristas más peligrosos del mundo», tal como define a Khalid Sheikh Muammad.
Según The New York Times, unos 200 reos considerados de alto riesgo fueron liberados o extraditados a otros países.
Abu Zubaydah, supuesto detenido de alto valor secuestrado en Paquistán en marzo de 2002, y quien pasó cuatro años y medio en prisiones secretas de la CIA, incluidas unas en Tailandia y Polonia, fue sometido en 83 ocasiones a la técnica de tortura conocida como waterboarding (submarino), forma controlada de asfixia por ahogamiento, mientras se encontraba bajo custodia de la CIA, en agosto de 2002.
Entre los casos de inocentes encarcelados, The New York Times destaca la historia de un pastor afgano llamado Sharbat, capturado cerca de un camino donde explotó una bomba. Los analistas de la prisión confirmaron que su historia era consistente, que sabía de pastoreo y que ignoraba todo acerca de conceptos políticos y militares. Aun así un tribunal militar lo declaró «enemigo combatiente» y en 2006 lo mandaron de regreso a Afganistán, señaló AFP.
El ejecutivo de Barack Obama deploró la filtración de los documentos y consideró desafortunado que los diarios decidieran publicar unas revelaciones que el portavoz de la Casa Blanca, Jay Carney, dijo no resultan nuevas para la administración y que además datan en su mayoría de tiempo antes de que el nuevo gobierno evaluara la situación.
En un comunicado conjunto firmado por el portavoz del Pentágono, Geoff Morrell, y el enviado especial para el cierre de la base, Daniel Fried, sostuvieron que Washington «seguirá trabajando para lograrlo», algo que la administración norteamericana prometió realizaría en su primer año de gobierno, pero que todavía no ha hecho.
Frente a estas declaraciones oficiales, organizaciones como la Unión de Libertades Civiles de Estados Unidos (ACLU), que lleva reclamando insistentemente el cierre de la ilegal cárcel, afirmaron que las nuevas revelaciones «subrayan la necesidad de una revisión judicial independiente» de los casos de las personas aún presas en la base.