Vigilia en la ESMA por los asesinados y desaparecidos. Foto: AP BUENOS AIRES.— La justicia argentina concedió la libertad a varios represores de la última dictadura militar (1976-1983) bajo proceso penal basándose en el tiempo que llevan detenidos sin que se haya pronunciado sentencia.
La decisión de la Cámara Nacional de Casación Penal, divulgada por todos los medios periodísticos, señala que la medida, que ha conmocionado a la opinión pública y a organismos de derechos humanos, no se aplicará de inmediato porque están pendientes las cauciones.
La medida beneficia a los ex capitanes de navío Alfredo Astiz y Jorge «El Tigre» Acosta, quienes fueron jefes del Grupo de Tareas que dirigió la tristemente célebre Escuela Superior de Mecánica de la Armada (ESMA), principal centro de represión y muerte del país ubicado en esta capital, y donde perdieron la vida o fueron torturados centenares de presos, dijo PL.
El procedimiento judicial también abarca a otros nueve ex oficiales de la Marina procesados por crímenes de lesa humanidad: Raúl Scheller, Juan Carlos Rolón, Jorge Rádice, Raúl González, Ernesto Weber, Antonio Pernías, Víctor Cardo, Alberto González y Néstor Savio.
Todos se encontraban detenidos por estar sometidos a procesos judiciales, pero la orden adoptada hoy señala que tienen el beneficio de la libertad hasta que se celebre el juicio, con el compromiso de que no se darán a la fuga.
El anuncio ocurrió pocas horas antes de un acto en la sede de la ESMA, convertido por el gobierno de Néstor Kirchner en Espacio para la Memoria, al cual acudió la mandataria Cristina Fernández.
«Hoy es un día de vergüenza para los argentinos, para la humanidad y para nuestro sistema judicial», afirmó la Presidenta durante su discurso, en el que también afirmó que «hoy debía haber sido un día no de alegría, pero sí de paz, serenidad y justicia» porque el gobierno celebraría junto con cientos de militantes la declaración de los Derechos universales del hombre, reportó Notimex.
«Debería haber sido un día de reconocimiento y reencuentro, pero no creo en señales ni en casualidades, sino en mensajes que son muy fáciles de descifrar. Justamente hoy la justicia argentina o miembros de ella ordenan la libertad de esas personas», agregó Cristina Fernández de Kirchner.
La decisión de la justicia es inexplicable y tiene tintes de perversidad, aseguró, porque obedece a la «maraña legal» que provocan los abogados de los represores apoyados en un sistema que debe renovarse.
Por último, dijo Notimex, advirtió que si esta decisión era un mensaje para amedrentar a su gobierno «nunca lo van a lograr y no porque sea muy valiente, sino porque no estoy dispuesta a atravesar el límite de la dignidad y el honor».
En la ceremonia, entregarían los premios Azucena Villaflor, el nombre de una de las fundadoras de Madres de Plaza de Mayo, asesinada en los llamados vuelos de la muerte (arrojada aún con vida en el mar) luego de ser denunciada por una infiltración de Astiz.
Tati de Almeida, una de las dirigentes de Madres Plaza de Mayo-Línea Fundadora, declaró al canal de televisión América 24 que la decisión es una cachetada en el rostro de quienes reclaman justicia por los crímenes de la dictadura y opinó que no hay casualidad en la coincidencia con el acto de hoy.