Ann Fraser-Pryce es la reina de la velocidad. Autor: Zimbio Publicado: 21/09/2017 | 05:38 pm
No sé cómo lo logra. Con solo 1,52 metros debería competir entre niñas, a fin de cuentas esa es la estatura de una escolar. Se nombra Shelly-Ann Fraser-Pryce y sigue demostrando por qué es la soberana en la prueba reina del deporte rey.
La pequeña gigante jamaicana paró los relojes en 10,71 segundos y se llevó la aureola en los 100 metros planos, estampando así la mejor marca de la temporada.
No importó que arrancara con «las sábanas pegadas» (174 milésimas). Su espectacular carburación, con pasitos cortos y potentes, le regaló la punta en un santiamén.
Cruzó la meta 22 centésimas por delante de la marfileña Murielle (10,93), dejando el bronce para la norteamericana Carmelita Jeter (10,94), titular de la edición precedente.
Con la bala al cuello Valerie Adams no tiene rivales. La neozelandesa, doble campeona olímpica y tres veces monarca planetaria, acaba de convertirse en la primera mortal que obtiene cuatro medallas de oro consecutivas en Campeonatos Mundiales de Atletismo, al ganar en la final de la justa moscovita con un tirazo de 20,88 metros. Victoria 39 al hilo.
La alemana Christina Schwanitz batió su récord personal con un tiro de 20,41 metros que le dio la medalla de plata. El tercer puesto, con 19,95, llenó el bolsillo de la china Lijiao Gong.
Después de toda una carrera siendo segundón, amén de sus grandes tiempos, el estadounidense David Oliver (13,00 segundos) ganó este lunes la prueba de 110 metros con vallas, al marcar el mejor crono de la campaña, relegando al segundo asiento a su compatriota Ryan Wilson (13,13).
Sergey Shubenkov, de Rusia, logró el bronce, (13,24), en una carrera en la que el as defensor Jason Richardson (13,27) y el soberano olímpico y plusmarquista universal Aries Merritt (13,31) quedaron cuarto y sexto, respectivamente.
Martillo en mano brilló el polaco Pawel Fajdek (81,97 metros), escoltado por el húngaro Krisztian Pars, (80,30) y el checo Lukas Melich (79,36). En tanto, la británica Christine Ohuruogu se proclamó campeona de los 400 metros planos al rematar eléctricamente en la misma meta a la favorita atleta de Botswana, Amantle Montsho.
Ambas marcaron 49,41 segundos, pero el foto finish favoreció la cabeza de la veterana inglesa. El bronce adornó el cuello de la local Antonina Krivoshapka (49,78).
Por otra parte, la sorpresa del día abrumó al galo Renaud Lavillenie, plateado en el salto con pértiga, al caer ante el alemán Raphael Holzdeppe. Los dos llegaron hasta los 5,89 metros, mas el germano solo necesitó un intento para manejar el muro, mientras el patrón de Londres 2012 apeló a su tercer vuelo y ahí mismo se le aguó la fiesta. Bjorn Otto, de Alemania, guardó el bronce (5,82).