Río de Janeiro, la ciudad de los pasados Juegos Panamericanos, vuelve a copar los titulares de las principales páginas deportivas del planeta. Allí se celebrará desde el próximo jueves el Mundial de Judo, que ya comenzó a dar noticias sin todavía la primera proyección.
Cuba estará representada por sus dos escuadras. En la escuadra femenina destaca la reaparición de la campeona del mundo del 2001 y bronce olímpico en Atenas 2004, Yurisleidys Lupetey, en los 57 kilogramos, mientras que seguirá siendo mirada obligatoria de la prensa mundial la presencia de Driulis González (63), quien busca su séptima presea en reuniones del orbe.
Completan la nómina del profesor Ronaldo Veitía, las campeonas mundiales del 2005 Janet Bermoy (48) y Yurisel Laborde (78), Sheila Espinosa (52), Yalennis Castillo (70), mientras en más de 78 y la abierta estarán Ibis Dueñas e Idalis Ortiz.
Justo Noda, entrenador jefe de la plantilla masculina inscribió a Yordanis Arencibia (66), un hombre que además de su tercer lugar olímpico en Atenas 2004, buscará el cuarto lauro mundialista (tiene tres de bronce), a los monarcas panamericanos Oscar Braison (más de 100) y Oreidis Despaigne (100), Jorge Benavides (90), Oscar Cárdenas (81), Ronald Girones (73), Yasmani Piker (60) y Tenochitlán Cárdenas (libre).
El evento ya es noticia, pues el surcoreano Park Yong Sung, presidente de la Federación Internacional de ese deporte (IJF, siglas en inglés), ha renunciado a su cargo, lo cual, por estatutos, representa automáticamente su exclusión como miembro del Comité Olímpico Internacional, reseña un despacho de la agencia Yonhap.
Pese a la sorprendente actitud de Park, el titular de la Federación Brasileña, Paulo Wanderley Teixeira, dijo que el certamen será un éxito, con 129 países confirmados y 776 judocas, 467 varones, números que representan récord de participación. La división más poblada es la de 81 kg (m), con 72 aspirantes a las medallas.