Muchas Orejas, Pocos Oídos
Un chipriota hizo que le injertaran una oreja en su antebrazo izquierdo como manifestación «artística», aunque para tener tres orejas, Stelious Arcadiou es un hombre que escucha poco, pues no parece importarle demasiado las duras críticas que ha recibido. Varios médicos aseguran que la cirugía fue practicada sin los cuidados sanitarios pertinentes y consideran grotesca la deformación del cuerpo humano. Pero Arcadiou sigue sin escucharlos. Su tercera oreja es meramente «ornamental», pues no está conectada al aparato auditivo de su cuerpo, aunque este parece ser el próximo objetivo: instalar un micrófono en la prótesis.
La justicia también pagaLa justicia es ciega, y también autocrítica, como demostró un juez de la provincia argentina de Chubut que se condenó a sí mismo a pagar los importes de una demanda por cometer un error procesal. El magistrado Gustavo Antoun abrió un caso como un trámite ordinario, pese a que lo correcto era iniciar un sumario por daños y perjuicios, según fuentes judiciales. Por ello decidió enmendar su equivocación declarando la nulidad del procedimiento y ordenándose a sí mismo pagar unos 7 000 pesos (1 560 euros), el máximo que fija la ley, según indica el juez en su resolución. ¡Y después dicen que la justicia no paga sus errores!
Amigo cepillo, ¿no?En India, una mujer debió ser operada para sacarle restos de un cepillo de dientes que se le habían incrustado en la nariz luego de un accidente doméstico. La mujer, de 31 años, absorbió el objeto durante un cepillado de rutina, tras tropezar con su marido. Sin embargo, el accidente derivó en una verdadera pesadilla, pues el sangrado de sus fosas nasales comenzó a ser tan cotidiano como el lavado de dientes, por lo que, tras dos meses de intensos dolores, acudió al hospital, donde los médicos descubrieron tres pedazos del utensilio atorados en su nariz.