Litz Alfonso Autor: Raúl Pupo Publicado: 21/09/2017 | 05:47 pm
De que el retorno al Karl Marx de Amigas no dejará indiferentes siquiera a aquellos que fueron privilegiados testigos de su estreno en el coloso de Miramar, en 2012, están convencidos no solo la dueña de la idea original y encargada de la dirección general, coreografías y guión (concebido junto a Juan Carlos Coello, responsable, además, del diseño de luces), sino también los integrantes todos del Ballet Lizt Alfonso Dance Cuba; las extraordinarias intérpretes que les han dado más que piel y voz a Mercedes, Caridad y Regla; los nuevos que llegan...
Y si no les creen, entonces Lizt Alfonso y sus seguidores convidan desde JR a los «incrédulos» a que se lleguen al teatro de los grandes acontecimientos para que a partir de este sábado 5 comprueben que la creatividad no encuentra límites cuando se combinan pasión por el arte, originalidad, talento, entrega absoluta...
Por eso, a sabiendas de lo que se trae «detrás del telón», la Alfonso insiste: «Que vayan a ver Amigas, que se van a sorprender». Y para que el público entienda por qué lo dice, ofrece más detalles: «Mira, cada vez que reponemos una obra no la enfrentamos exactamente igual. Para esta nueva temporada solicité refuerzos, pues quería contar la historia de una manera más evidente, como lo exige el musical como género.
«Busqué un amigo de los años, el actorazo Osvaldo Doimeadiós, y le pedí que me ayudara a trabajar la parte interpretativa de cantantes y bailarines, pero también que analizara la dramaturgia, pues me había propuesto introducir un personaje de quien únicamente se escuchaba la voz en off: el presentador de Música y estrellas, programa estelar donde son invitadas estas tres cantantes de los años 50 (Mercedes, Caridad y Regla), quienes integraron un famoso trío que se desintegró... Pues bien, ahora este personaje estará en escena».
Los refuerzos
Sin dejar a un lado el trabajo con sus alumnos de la ENA ni su habitual programa de radio, Doimeadiós respondió de inmediato al llamado de la creadora de Vida, Elementos, Fuerza y compás. «La verdad, confesó, me llenó de satisfacción la convocatoria de Lizt, sobre todo porque las obras de esta naturaleza no dejan de madurar... Así, exploramos la puesta para ver cómo la enriquecíamos.
«De paso, en Amigas asumo un papel pequeño: la persona que pedirá aplausos y dará entrada al presentador... Pensamos que un coordinador del show le aportaría más credibilidad a la historia que se desarrolla dentro de un programa de televisión».
Interactuando casi todo el tiempo sobre las tablas con el Premio Nacional del Humor estarán los populares Lieter Ledesma (Playa Leonora) y Marino Luzardo, que se probará por vez primera en una empresa de este corte. «Desde el principio Lizt tuvo la intención de introducir al “presentador”, de modo que en cuanto me invitó, acepté, consciente de que Doime estaría detrás en el asesoramiento».
Este competente comunicador y rostro de Mediodía en TV confesó a JR que nunca antes se había sometido a la «presión» de una compañía. «En la televisión y en la radio todo marcha más como tú eres. Por lo general, en ellos los directores dejan que tu personalidad aflore, pero aquí te debes al colectivo, a la obra».
Como Marino, Geidy Chapman se «lanzará» en este espectáculo para que comparta con Sory la tarea de vestir a Regla. Y todo parece indicar que —al igual que pasó con Yaima Sáez (Caridad)—, esta fabulosa intérprete con una sólida carrera internacional, pero apenas conocida en Cuba, será la gran sorpresa.
«Me ha tocado una faena bien difícil: hacer mío un personaje como Regla, y me está costando mucho sudor, mucho trabajo y hasta lágrimas, pero es la única forma de que quede con la mayor calidad posible. Doime, la maestra y las muchachas me han ayudado constantemente. Todavía me quedan detalles por perfilar, pero espero que los espectadores en el Karl Marx queden complacidos con mi actuación».
Agraciadas y experimentadas voces
Que las superreconocidas Niurka, Sory y Yaima centren el elenco resulta motivo suficiente para que el Karl Marx agote inmediatamente sus localidades, por lo menos hasta el 20 de abril (funciones de jueves a sábados, 9:00 p.m., y domingos, 5:00 p.m.). De las tres, solo las dos primeras tuvieron la oportunidad de estrenar en Hamburgo, Alemania, y luego actuar en diferentes teatros de la Isla, y en el Reino de Bahrein. Entonces, nadie mejor para decir con propiedad que «cada vez que Amigas sube a escena, el espectáculo se supera a sí mismo».
«De lo que empezó a ahora, enfatiza la Reyes, el crecimiento ha sido absoluto. Por supuesto que nosotros, como artistas, también hemos evolucionado enormemente. Te lo aseguro yo, que llevo unos cuantos años de carrera: Amigas ha sido como una tesis de graduación, a pesar de que cantar es el pan nuestro de cada día, pero nos hemos visto “obligadas” a actuar, bailar, cantar. Claro, la satisfacción que sentimos es muy superior».
Yaima Sáez considera en tanto que Amigas las ha transformado en artistas más completas. «Es muy reconfortante comprobar que formas parte de un proyecto en el que hay seguridad de lo que se quiere, donde cada detalle ha sido pensado, donde existe un concepto artístico claro de lo que se desea defender... Ello explica que sea una obra de altísimo rigor y que pueda presentarse en cualquier parte del mundo y triunfar».
Sory también lo cree: «Quedó demostrado en el Reino de Bahrein, donde encontramos una cultura diferente a la nuestra. Nos aparecimos con una obra de una cubanía al ciento por ciento, sin hacer concesiones, ni caer en la chabacanería ni en la típica mulata y el ron, sin embargo, el público se “vino abajo”. Y es porque tiene el sello Lizt, que refleja un profesionalismo a prueba de balas».
Enormes desafíos
Con un promedio de edad de 26 años, los jóvenes miembros del grupo musical han asumido con complacencia el reto de enfrentar un espectáculo como Amigas. Algo que ha sido posible, afirma su director Efraín Chibás, «porque hemos estudiado profundamente. Es un montaje muy variado que exige que domines los más diversos estilos: no solo la música del patio, la norteamericana, sino también la clásica... Hay que estar muy preparados, sinceramente».
Y esas composiciones admirables firmadas por Formell, Pablo Milanés, Giraldo Piloto y Alberto, Amaury Pérez... son las que sirven de base para el lucimiento de bailarinas y bailarines, dotados de gracia y una técnica depurada, como las primeras figuras Yadira Yasell, Claudia Valdivia, Bibiana Peláez, Oddebí García y Joan Morell.
De todos, solo Bibiana es la muestra viva de lo que puede lograr la escuela del Ballet Lizt Alfonso, por haberse formado en sus talleres desde los cinco años. «Regla me encantó, admite, desde que Lizt lo empezó a trabajar con la primera bailarina que antes lo defendía. Me siento muy bien poniéndole un poquito de mí».
Distinto pasó con Yadira, quien pertenecía a la agrupación danzaria que conduce la maestra Laura Alonso. «Siempre me atrajo esta propuesta artística. Estuve más segura cuando me emocioné como espectadora viendo Amigas hace dos años. ¡Y ahora estoy entre las protagonistas. ¿Te imaginas? Mi alegría es inmensa».
También Claudia Valdivia, como Yadira, extraña de vez en cuando las puntas. No podía ser de otra manera cuando egresó de la Escuela Nacional de Ballet, pero «en cuanto me gradué le expresé a Lizt mi interés de unirme a su compañía», cuenta.
«He interpretado otros papeles de primera bailarina, pero enfrentar este desde cero constituyó un desafío mayúsculo. Creo que ya no le “tememos” a nada (sonríe)».
Oddebí y Morell son sus compañeros en la escena. Si García ha estado desde el principio, Morell se incorporó en 2012. Ambos, ex primeros bailarines del Conjunto Folklórico Nacional (CFN), ahora conforman la compañía, junto a Jerlandys Milián.
«Todo cambió cuando se llevó Vida a Canadá. Luego la maestra ha aprovechado, por suerte, la presencia masculina en sus espectáculos», explica Oddebí, a quien no le quedaba otra que convertirse en un formidable bailarín, siendo hijo de Silvina Fabars y Juan García, y sobrino de Johannes García, todos estrellas del CFN.
No existe en Morell esa influencia. De hecho, este espirituano se acercó a la danza «de pura casualidad». El «puntillazo» vino al bailar por primera vez frente a un público que lo aplaudió fervientemente. «Me oriné en los pantalones. Fue definitivo. El impulso que necesitaba. Tenía 12 años cuando me dije: esto es lo mío (sonríe)».
Y de que la danza es lo suyo se percatarán quienes se lleguen al Karl Marx. Allí estarán todos aguardando la merecida ovación. Entonces Oddebí y Joan comprobarán otra vez que no se equivocaron al decidirse por esta tropa que comanda Lizt Alfonso en la que «hemos podido experimentar cosas nuevas, donde hallamos la oportunidad de probarnos como artistas aún más integrales».