La muestra presenta una variedad considerable de clásicos y artistas aclamados por la crítica. Es la primera vez que sale de Estados Unidos una colección tan amplia de los fondos de la Fundación Fontanals-Cisneros Autor: PL Publicado: 21/09/2017 | 05:21 pm
A los amantes del buen arte universal, me gustaría recomendarles que dejen por un momento sus catálogos y pasen por la sede de Arte Universal del Museo Nacional de Bellas Artes; pues podrán encontrar, como parte de las acciones de la 11 Bienal y durante tres meses, una monumental exposición que reúne 85 piezas de la Fundación Fontanals-Cisneros, la cual lleva por nombre CIFO: Una mirada múltiple.
Este es un proyecto de gran envergadura, por primera vez sale de Estados Unidos una colección tan amplia de los fondos de esta institución. Grandes formatos se representan en estas piezas, que comprenden las expresiones artísticas de cuatro continentes (América, Europa, África y Asia), así como representantes de las más disímiles escuelas y corrientes artísticas; para realizar un recorrido por el panorama de las artes visuales en los últimos 50 años.
La muestra presenta una variedad considerable de clásicos y artistas aclamados por la crítica como Michelangelo Pistoletto, Jannis Kounellis, Nam June Paik, Joseph Kosuth, Marina Abramovic, Vito Acconci, John Baldessari, Sophie Calle, María Fernanda Cardoso, Olafur Eliasson, Tracy Emin, Eugenio Espinoza, Andreas Gursky, Mona Hatoum, Rafael Lozano-Hemmer, Jenny Holzer, William Kentridge, Joseph Kosuth, Barbara Kruger, Ana Mendieta, Gupta Subdoh, Ai WeiWei, Gabriel Orozco; además de artistas emergentes y de media carrera que son de gran relevancia para la fundadora y presidente de CIFO, Ella Fontanals-Cisneros. Así como los cubanos Jorge Pardo, María Martínez Cañas, Leyden Rodríguez Casanova, Ana Mendieta y Félix Julio Gonzáles Torres, estos dos últimos ya desaparecidos.
La expo está concebida a través de varios núcleos temáticos, en los cuales se agrupan las obras, que responden a secciones determinadas de los fondos privados de Ella Fontanals-Cisneros, que, en ocasiones anteriores, siempre se han expuesto por separado. Uno de los núcleos más significativos es el dedicado al arte latinoamericano contemporáneo, que responde claramente a uno de los objetivos esenciales de la Fundación, que es promover esta producción artística de nuestra área geográfica.
Tras el lenguaje múltiple y diverso de CIFO: Una mira múltiple, en el concepto curatorial se enfatiza sobre estas características de la muestra. De hecho, Osbel Suárez, curador de la exposición, explica que la misma no está pensada con un carácter tradicional, sino que el espectador puede hacer el recorrido como mejor le parezca, sin ningún tipo de orden o preferencia. Así cada persona tiene la libertad de hallar la propia lógica de su mirada en las representaciones conceptuales que se sugieren, asumiendo la perspectiva posmoderna que concibe al arte contemporáneo como una acción múltiple que transita una pluralidad de discursos.
En este sentido, la Colección CIFO se adecua a los preceptos de la 11 Bienal de La Habana, pues es capaz de reconfigurar los imaginarios sociales, a partir del acercamiento individual de cada participante.
Sin lugar a dudas, CIFO: Una mira múltiple constituye, como suceso cultural, una verdadera revelación, pues resulta una de las exposiciones colectivas más abarcadoras y valiosas de arte contemporáneo que se han presentado en Cuba. Indiscutiblemente, es un regalo de lujo para el público cubano.