Una de las líneas que marcó el encuentro fue la importancia de conocer la historia Autor: Roberto Suárez Publicado: 21/09/2017 | 04:52 pm
Seguros de que el conocimiento de la historia y una mayor preparación constituyen herramientas esenciales para defender las conquistas de la Revolución y responder a las necesidades del país, debatieron este sábado los estudiantes de la enseñanza media en su Consejo Nacional, el cual sesionó en la Escuela Nacional de Cuadros de la UJC, en la capital.
Una de las líneas que marcó el encuentro fue la importancia de un pensamiento maduro y responsable, en torno a la continuidad histórica del socialismo, entroncado con la necesidad de que las nuevas generaciones vivan y sientan su historia, más allá del conocimiento técnico de la asignatura.
Carlos A. Bello, estudiante de Cienfuegos, consideró que hay estudiantes «que no la sienten, no viven sus epopeyas y eso no lo debemos permitir».
Los alumnos coincidieron también en la urgencia de utilizar mejor la lengua materna y la ortografía, no con la mera idea de aprobar un examen sino para desarrollar una formación más integral.
Además, se abordó el papel del grupo como espacio de la preparación de las nuevas generaciones y el desarrollo de las transformaciones del sistema educacional, para que los estudiantes lleguen a la universidad con una preparación más completa.
Olga Lidia Tapia, miembro del Secretariado del Comité Central del Partido, recalcó la relevancia del momento actual de la educación cubana, en el que se ponen en práctica transformaciones encaminadas a perfeccionar nuestro sistema y mejorar la preparación de los educandos.
A este debate se sumó la necesidad de una mayor incorporación de los jóvenes a las carreras pedagógicas, ante el déficit de maestros.
La vinculación del estudio con el trabajo, como apoyo a nuestra realidad económica y productiva, resultó otra temática abordada. La estudiante Yaneydis Ojeda alertó que en medio de la situación de crisis que vive el mundo y que golpea a Cuba, los más jóvenes deben entender su responsabilidad en el impulso de la economía.
Los dirigentes juveniles se mostraron conscientes del reto que muchos tienen por delante para articular el trabajo político-ideológico en sus centros, y en la misión de llevar las ideas «cuesta arriba», de predicar con el ejemplo, en la dura escuela de la vida de su época, y su incondicionalidad con la obra revolucionaria.
Liudmila Álamo Dueñas, primera secretaria de la UJC, exhortó a los estudiantes a desarrollar, junto a sus profesores, las transformaciones que experimenta el país, con más preparación, información y combatividad frente a lo mal hecho, para ser esa continuidad histórica en la que confía nuestra Revolución.