Los sistemas de transferencia de datos entre dispositivos podrían experimentar un salto este año con la salida al mercado de una nueva tecnología que promete un desempeño nunca antes visto
Transferir hacia nuestra computadora o desde esta 25 gigabytes (GB) de información en apenas 70 segundos, o sea, un minuto y diez segundos, parece hoy algo imposible, y sin embargo está a las puertas. Así aparecen dadas las primeras presentaciones de las USB 3.0.
La USB 2.0 es una conexión muy extendida actualmente en el mundo informático, ya que son usadas en memorias externas, teléfonos móviles, agendas personales, cámaras fotográficas y de video, reproductores de música e imágenes y hasta en discos externos.
Sin embargo, la lentitud relativa de la copia de datos desde y hacia estos dispositivos constituye para muchos una barrera en su uso, aun cuando hoy puedan almacenar hasta 128 GB, o lo que es igual, tanta como cabría en unos 91 000 disquetes, aproximadamente.
Por eso, ante la necesidad de acelerar la transferencia de datos, y a su vez de poner en el mercado nuevos dispositivos cada vez más veloces, un grupo de grandes empresas de la industria informática se han unido para crear el estándar USB 3.0, que todo indica se hará realidad este año.
Historia en flashEs muy común actualmente ver a alguien que trabaje con equipos informáticos utilizando al menos una memoria flash, quizá el más extendido de los dispositivos USB, o Universal Serial Bus, como se denomina en inglés.
Estos pequeños dispositivos, resistentes en muchos casos a golpes, al polvo y a la humedad en algunos casos, son capaces de almacenar por largo tiempo gran cantidad de información, y teóricamente su vida útil puede alargarse, si son bien usados, durante 20 años y reescribirse hasta un millón de veces.
Dadas esas potencialidades han desbancado en poco tiempo a los disquetes, discos compactos y DVD como soporte de almacenamiento de información, convirtiéndose en herramienta preferida de quienes diariamente tienen que transportar documentos, imágenes, videos, y hasta programas informáticos.
Su relativo bajo costo, unido a la posibilidad de almacenar y reescribir mucha información, y su pequeño tamaño, han contribuido a que hoy sean muy cotidianas y se utilicen profusamente como elementos promocionales en campañas de relaciones públicas, o se vendan como obsequio añadido cuando se compra un producto informático mucho más caro.
Lo increíble es que hace apenas unos 15 años las flash USB eran apenas un sueño, y las primeras fabricadas por la International Bussines Machine (IBM) para reemplazar a los disquetes en sus computadoras portátiles o laptops, fueron vistas con mucho recelo por los amantes de la tecnología.
En aquel entonces eran mucho más grande que ahora, en varios casos precisaban de baterías para funcionar, y apenas podían almacenar de 16 a 64 megabytes de información, lo cual parecía una migaja comparado con lo que ofrecían los entonces reyes CD-Room, que podían contener 700 megabytes de información y algunos formatos daban la posibilidad de ser reescritos o «quemados».
Pero las «enanitas» memorias USB demostraron en muy poco tiempo ser las gigantes de los nuevos tiempos.
Pronto IBM, que no patentó el invento, contrató a la compañía M-Systems para desarrollar y fabricar una nueva generación de memorias flash, y a esta le siguieron los pasos varios fabricantes chinos, extendiendo su comercialización y aumentando gradualmente la capacidad de almacenamiento hasta los actualmente casi increíbles 128 gigabytes de memoria, límite que podría crecer aún más con el USB 3.0.
Pero si las flash o «pen drive», como también se les dice entre otros innumerables nombres, son la cara más visible de la tecnología USB, no es la única aplicación que tienen, pues prácticamente se han extendido a todos los campos y dispositivos que precisan de transferencia de datos informáticos.
¿Superspeed USB?Según varias publicaciones especializadas que fueron consultadas para este trabajo, pronto el USB 3.0 comenzará a hacerse realidad a nivel de equipos, pues las especificaciones tecnológicas del también llamado SuperSpeed USB, ya se están repartiendo entre fabricantes de tecnología.
El nuevo sistema, como evidencian las primeras pruebas, podría realizar transferencias de datos a más de 300 megabytes por segundo. A su vez ofrecería una mejora en su duración y en el ahorro de energía, algo que se ha criticado bastante a su antecesor y actualmente sistema en funcionamiento, el USB 2.0.
Para hacer realidad esto se conformó hace unos años el USB-IF, una especie de grupo promotor de la USB 3.0, formado por megaconsorcios informáticos como Hewlett-Packard Company, Intel Corporation, Microsoft Corporation, NEC Corporation, ST-NXP Wireless y Texas Instruments, entre otros.
Ellos pusieron tanto el financiamiento como la intención de incluir la nueva forma de conexión en sus equipos, hasta tanto este haya probado su fiabilidad y buen rendimiento.
Superada la fase de diseño, redactadas las especificaciones tecnológicas y programados los controladores necesarios para reconocerla, los primeros equipos con USB 3.0 podrían estar a principios del próximo año en el mercado o antes, y se espera que lleguen tanto en forma de nuevas memorias flash mucho más potentes, como en conectores dentro de las computadoras portátiles.
El presidente de USB-IF, Jeff Ravencraft, reconoció que la SuperSpeed USB es una necesidad impostergable, pues «hoy los consumidores están usando archivos de gran tamaño que necesitan ser transferidos de forma fácil y rápida desde los PCs a los dispositivos y viceversa».
También será un jugoso negocio que se perfila en el orden de las decenas de millones, pues si en su salida al mercado la nueva modalidad será inicialmente compatible con la USB 2.0 y su versión 1.0, todo indica que las altas velocidades de transferencia de datos hará que se imponga en la preferencia de los consumidores.
Lo anterior se traducirá en excelentes niveles de ventas, algo muy necesario para la industria informática, golpeada duramente por la crisis económica mundial.
Por el momento estas son apenas especulaciones, ya que actualmente no existe en el mercado ningún dispositivo que soporte el USB 3.0, cuyos conectores son diferentes a los tradicionales.
Gigas supersónicosLos primeros modelos de la nueva tecnología presentados al público especializado, ya que en realidad se conoce bien poco de esta, indican que se tratará de conectores muy parecidos a los USB actuales, con ligeras modificaciones.
En el caso del puerto USB 3.0 se añaden cinco contactos nuevos que son los que utiliza el canal de alta velocidad, los cuales se suman a los cuatro contactos clásicos de la USB 2.0, buscando que ambos sean compatibles.
No obstante, las mini-USB sí serán totalmente diferentes a las actuales, ya que en este caso incluirán solo cinco contactos para el canal de alta velocidad, por lo cual no serán compatibles con los conectores actuales para esta modalidad.
También las computadoras y otros dispositivos cambiarán su diseño para acoger la USB 3.0, e incluso otras modalidades de transferencia de datos, por lo cual ya está casi al salir al mercado la ExpressCard 2.0, destinada a «leer» las tarjetas de memoria, y que soportaría transferencias hasta diez veces más rápidas que la versión actual.
Es muy posible entonces que la era de los pequeños tamaños, pero con grandes prestaciones, tenga en los próximos años un salto sorprendente, dejando atrás incluso a los actuales superformatos de DVD, los llamados Blue Ray.
A su vez significarán un avance sustancial sobre tecnologías de transferencia de datos como el FireWire y eSATA, conexiones para la transferencia de datos utilizadas en servidores, computadoras y discos duros, que hoy son más costosas o están pensadas exclusivamente para pasar información desde o hacia dispositivos de almacenamiento.
Lo real es que la USB 3.0 promete asombrar a muchos con sus velocidades de transferencia, como lo demuestra un experimento comparativo realizado entre las tres versiones para transferir 25 gigabytes de información.
Si con la USB 1.0 llevar de un dispositivo a otro esa cantidad de información tomó más de nueve horas, con la 2.0 demoró 13,9 minutos, mientras que con la 3.0 apenas tomó un minuto y diez segundos.
Su superioridad es innegable y, sin embargo... podría morir pronto.
Filtraciones de investigaciones a nivel de laboratorio indican que ya se están diseñando conectores USB utilizando fibra óptica, lo cual dimensionaría aún más su velocidad... Aunque quizá en ese caso estaríamos hablando en el futuro próximo de la USB 4.0.
La Red al Día
EL GUSANO INFORMÁTICO CONFICKER ha causado pérdidas por más de 9 100 millones de dólares, según un estudio realizado por investigadores del Cyber Secure Institute, de Estados Unidos. El programa maligno utiliza muchos métodos de ataque, desde técnicas de fuerza bruta para adivinar claves y contraseñas, hasta infecciones a través de unidades USB para replicarse en Internet. Esto ha ocasionado innumerable pérdida de información, e incluso por tiempo y recursos invertidos tanto en su eliminación como en contrarrestar sus efectos, alegan los especialistas... MICROSOFT HA DECIDIDO REFORZAR Y A LA VEZ SIMPLIFICAR LA SEGURIDAD DE SU NUEVO WINDOWS 7, ante las críticas recibidas de expertos que han consultado la primera versión, luego de que la compañía la presentara al público el pasado mes de enero. Entre las medidas de seguridad que tendrá el nuevo sistema operativo está un mayor control de las cuentas de usuarios, mientras que ofrecerá la posibilidad de configurar accesos remotos seguros a la máquina, especialmente en su versión corporativa... PLANETAS SIMILARES A LA TIERRA EN TORNO A ESTRELLAS PARECIDAS AL SOL pudieron ser captados gracias a las imágenes enviadas a la Tierra por la sonda espacial Kepler, de la Agencia Aeroespacial de Estados Unidos. El equipo captó espectaculares escenas en el sector Cygnus-Lyra, en la Vía Láctea, que se encuentra a unos 13 000 años luz de nosotros. La nave, cuya misión es buscar planetas similares a la Tierra, escudriñará durante tres años y medio entre más de cien mil cuerpos celestes similares al Sol y planetas con temperaturas que permitan la existencia de lagos y océanos.