La CTC y la UJC convocaron a participar en una jornada nacional de esfuerzo productivo, la cual se extenderá durante un año, en homenaje al aniversario 50 del primer trabajo voluntario, protagonizado por el Guerrillero Heroico, el 22 de noviembre de 1959
«Además del simbolismo de unidad e integración que entraña marchar unidos a los lugares más necesitados, es infinito lo que pueden hacer de conjunto la Unión de Jóvenes Comunistas y el movimiento sindical, en aras de la recuperación».
Así afirmó, este sábado, el miembro del Buró Político Salvador Valdés Mesa, secretario general de la CTC, durante una jornada de trabajo voluntario en áreas agrícolas del municipio habanero de Batabanó, en la cual participaron cientos de jóvenes, trabajadores, estudiantes y campesinos, y que tuvo su réplica en todas las provincias, esencialmente en tareas agrícolas y otras vitales para la recuperación tras el paso de los huracanes.
De este modo, la CTC y la UJC convocaron a participar en una jornada nacional de esfuerzo productivo, la cual se extenderá durante un año, en homenaje al aniversario 50 del primer trabajo voluntario, protagonizado por el Guerrillero Heroico, el 22 de noviembre de 1959.
Valdés Mesa consideró que el esfuerzo desplegado contribuirá a levantar una voluntad de trabajo y a dignificar la laboriosidad.
Julio Martínez Ramírez, primer secretario de la UJC, recalcó que este llamado exige la eficiencia cotidiana en el lugar donde cada día actuamos. Habrá siete convocatorias masivas, pero cada comité de base y sección sindical tendrá la posibilidad de organizar sus movilizaciones que deberán ser consecuentes con la racionalidad y eficiencia.
El dirigente juvenil consideró que con la entrega de todos los sectores saldremos adelante, y cumpliremos con el llamado de Raúl de hacer estrictamente lo necesario en cada lugar.
Jesús Ramón Zamora, integrante de la columna juvenil Aniversario 50 de la Revolución, tuvo a su cargo la lectura de la convocatoria. «Hoy, juntos, obreros, campesinos y estudiantes, con su Ejército Rebelde, vamos a construir una nueva Cuba», aseguró, aludiendo al Che.
Militantes de la UJC incorporados a campamentos productivos, tras el paso de Gustav y Ike, fueron reconocidos por su aporte en la producción de alimentos.