Acuse de recibo
La sensibilidad del tunero William Daniel Arias García, vecino de Luis Aldana No. 14, Rpto. La Carretera, Amancio Rodríguez, trajo a esta columna el rostro añoso de Nicolás López Nelson y su imperiosa necesidad de ayuda.
Narraba William que el holguinero Nicolás vivía solo, en una casa en pésimas condiciones, mal alimentado, enfermo, y que no se había podido concretar para él, por falta de capacidad, un sitio en algún hogar de ancianos, sitio donde hacía rato debía estar para su mejor cuidado.
Al respecto contestaron a JR Yordanis Pérez Urrutia, presidente de la Asamblea Municipal del Poder Popular (AMPP) de Mayarí, y María Elena Consuegra Gómez y Dalila Almaguer Betancourt, directora y subdirectora de Prevención, Asistencia y Trabajo Social, respectivamente, de la Dirección Provincial de Trabajo y Seguridad Social de Holguín.
La carta de Yordanis reproduce lo comunicado por María Isabel Feliú, jefa del departamento de Asistencia Social de Salud en el municipio: que Nicolás se encuentra incluido «en la Base de Datos de Estudios de Familia con el No. ID 11089 como caso crítico, se estudió como adulto mayor, es jubilado y vive solo. En 2014 fue visitado para internarlo en un hogar de ancianos y no estuvo de acuerdo, lo que consta en acta firmada por López Nelson».
Luego de salir en esta sección la alerta pública, refiere el Presidente municipal, «visitamos nuevamente al compañero, quien estuvo de acuerdo con la propuesta de ser internado en el hogar de ancianos de Urbano Noris; (…) fue ingresado el día 20 de noviembre». Termina la escueta misiva calificando el caso con razón y solucionado.
La contestación de María Elena Consuegra Gómez y Dalila Almaguer Betancourt argumenta con más precisión y detalles lo acontecido con el veterano. Se trata, apuntan las directivas, de un adulto mayor de 72 años, limitado visual, jubilado con una cuantía de 242 pesos, y cuyos problemas están caracterizados en la documentación de la Dirección Municipal de Trabajo (DMT).
«Nicolás cuenta como familiar obligado con una hija, Lisandra López, que vive en el municipio de Cueto, consejo popular de Marcané, y tres hermanos adultos mayores; uno de ellos, Sanson, de 81 años, es el que está a cargo de su alimentación».
La comisión que investigó la demanda pudo comprobar que la DMT «había realizado análisis y evaluación del caso, y se adoptaron medidas para la atención, tales como: propuesta de aprobación del servicio de alimentación del Sistema de Atención a la Familia para Nicolás y Sanson, quienes no estuvieron de acuerdo (ellos) por la lejanía del comedor, y aprobación de una asistente social a domicilio excepcional, lo que no se concretó, por no encontrar a una persona que se dedicara a su cuidado debido a la situación de su vivienda».
Evaluado por las entidades correspondientes del municipio, en aras de mejorar su situación se adoptó el acuerdo que procedía: el ingreso a un hogar de ancianos. Se pudo verificar que «esto no se había logrado por no contar el municipio con capacidad», sostienen las especialistas.
Y concluyen: «En valoración realizada del caso y con la conformidad de Nicolás, se aprobó una capacidad para el hogar de ancianos del municipio de Urbano Noris». Su ingreso tuvo lugar el día 15 de noviembre del año en curso, recogen en su carta.
Agradezco ambas misivas. Ojalá siempre, ante cada queja, todas las entidades que tengan responsabilidad expresen a la opinión pública sus razones. Señalo que en la contestación del Presidente de la AMPP, ante un caso tan delicado, se extraña una contextualización de la historia del anciano y sus avatares.
Alegra saber que ya Nicolás está en el hogar de ancianos (haya sido el 15 o el 20 de noviembre la fecha de entrada). Pero alarma constatar que de no sonar el aldabonazo en un medio de prensa, quizá aún estuviese penando el mayor, pues aunque estaba incluido en los estudios y bases de datos del municipio, desde 2014, ante una negativa de él, no se había abierto nuevamente «la gaveta» de su necesario internamiento.