Más allá de sus reglas particulares, el deporte tiene otras leyes para solucionar historias de vencedores y vencidos, de inocentes y tramposos.
Y tal parece que la relación entre el músculo y la ley se hace cada vez más notoria, pues en lo que va de año, el Tribunal de Arbitraje del Deporte (CAS, siglas en inglés) atendió un número récord de apelaciones. Incluso, se espera que el nuevo código antidopaje arrastre más litigios el año próximo.
Según un despacho de la agencia Reuters, cerca de 300 apelaciones fueron recibidas este año por el organismo judicial. Alrededor del 55 por ciento de los casos estuvieron vinculados al fútbol —incluyendo contratos rotos, transferencias y licencias de clubes—, en tanto un tercio provino de violaciones de dopaje en distintos deportes.
«Se rompió el récord. Se registraron 287 casos en lo que va de este año, incluyendo 10 procedimientos relacionados con los Juegos Olímpicos de Beijing. Todavía quedan algunos días de diciembre y la cifra pudiera crecer», dijo a la prensa Matthieu Reeb, secretario general del CAS.
Entre las intervenciones más memorables de la entidad en los últimos 12 meses se encuentra el levantamiento de la prohibición que impedía al sudafricano Oscar Pistorius, quien corre con fibras de carbono por tener ambas piernas amputadas, competir con atletas convencionales.
La Asociación Internacional de Federaciones de Atletismo (IAAF, siglas en inglés) argumentó sin éxito ante el CAS que las extremidades artificiales de Pistorius le dan una ventaja injusta sobre el resto.
El órgano de justicia deportiva también confirmó una suspensión de dos años por dopaje para el ciclista estadounidense Floyd Landis, quien dio positivo en un control antidopaje en el Tour de Francia 2006.
El CAS, que tiene sus oficinas centrales en Lausana, Suiza, y celebrará su aniversario número 25 en junio de 2009, expandió su rol en el deporte, especialmente después de que la FIFA reconoció su jurisdicción en el 2004. Una red de 266 mediadores de 77 países lleva adelante sus fallos.
El nuevo código de la Agencia Mundial Antidopaje entrará en vigencia a partir del 1ro. de enero de 2009 e implicará un paso de avance en la guerra contra las drogas que mejoran el rendimiento deportivo. Además, dará a las federaciones más oportunidades para suspender a los deportistas que den positivo en algún control.
También el primer día del próximo año la Federación Internacional del Automóvil comenzará a acatar las decisiones del CAS y ello garantizará su influencia legal sobre las más importantes disciplinas deportivas.