Una vez más, la Academia Latina de la Grabación reconoce producciones realizadas por casas discográficas cubanas Autor: Juventud Rebelde Publicado: 21/09/2017 | 06:38 pm
Aún falta un buen tiempo para que los nuestros conozcan si finalmente resultaron ganadores de la edición 17 de los Grammy Latinos, lo cual se sabrá el venidero 17 de noviembre, cuando tenga lugar la acostumbrada ceremonia que otra vez acogerá Las Vegas, en Estados Unidos. De cualquier manera, Omara Portuondo, el Septeto Nacional Ignacio Piñeiro, David Calzado y la Charanga Habanera, y Tony Ávila ya se sienten ganadores con el notable hecho de haber conseguido la nominación de la Academia Latina de la Grabación.
Es lo que consideran estos reconocidos artistas que, convocados por el Instituto Cubano de la Música (ICM) y sus respectivas casas disqueras (en este caso Egrem y Bis Music), se encontraron este viernes con la prensa, en el Tablao del Gran Teatro de La Habana Alicia Alonso. Posiblemente es lo que también piense el autor de Sonata para los viajeros (Mejor obra/composición clásica contemporánea), el maestro Leo Brouwer, quien no pudo estar presente por estar ultimando detalles del 1er. Festival Contratenores del mundo, que abrirá el próximo 30 de septiembre.
Lo cierto es que la satisfacción es general, y no es para menos. Ela Ramos, directora general de Bis Music, por ejemplo, no pasa por alto que nuestros artistas destacaran entre las más de 1 500 propuestas que llegaron a la Academia, «lo cual corrobora las potencialidades, la calidad de nuestra música y el valor de nuestros artistas». Máxime cuando ese sello solo realizó seis producciones discográficas, dos de las cuales fueron nominadas: El más grande y universal, del Septeto Nacional Ignacio Piñeiro; y Canciones de Cri Cri «El Grillo Cantor», de la Portuondo.
Omara, por supuesto, se mostró muy feliz de que en la categoría Mejor Álbum de Música Latina para Niños se valorara tan altamente un proyecto que la hizo regresar a su infancia, gracias a estas 14 canciones compuestas por el afamado cantautor mexicano Francisco Gabilondo Soler a las que la Diva puso mágica voz, por idea de Alexis Núñez Oliva, con la complicidad de «músicos extraordinarios» y de los productores José Manuel García y Eddy Cardoza López.
Frank «El Matador» Oropesa, por su parte, no sabe si a la tercera en estas lides será la vencida del casi nonagenario Septeto Nacional Ignacio Piñeiro con El más grande y universal (Mejor Álbum Tropical Tradicional), pero igual andan locos de contentos porque «volveremos a representar a Cuba en los Grammy Latinos. Sin duda es un éxito que se logre justicia con la buena música que se hace en la Isla. Por tanto el premio es de Cuba».
Egrem, la más experimentada de la Isla, también va con dos joyas: Vivito y coleando, de David Calzado y la Charanga Habanera (Mejor Álbum Tropical Contemporáneo) y con Tronco viejo (Mejor Álbum de Salsa), el disco con el cual un grande del continente como Johnny Ventura quiso hacerle reverencia a la música criolla.
Pero con Tronco viejo, que tuvo como productor musical a Edesio Alejandro, el afamado merenguero no solo se dio el gusto de cantar María con el también creador de recordadas bandas sonoras para cine, sino que además convidó a Silvio Rodríguez (Flor de pantano), a la mismísima Omara Portuondo (Nada de ti) y a Gilberto Santa Rosa, con quien le dio sabor a La bala, justo el tema por el que Tony Ávila, firmante de cinco de los diez tracks del fonograma (también hizo en dúo con el dominicano su La vida vs. La muerte), opta por el galardón correspondiente a la Mejor canción tropical.
«Resulta genial que Tronco viejo esté nominado. Todavía estoy digiriendo la noticia, porque me sorprendió. Y es que se trata de un disco que llegó a la Academia por otras vías, pero de todos modos en él están involucrados importantes instrumentistas de la Isla que, como yo, ya se sienten premiados, como también me ocurre cuando Ventura, Gilberto Santa Rosa, Gran Combo... cantan mis canciones», asegura el compositor de la popular La choza de Chacho y Chicha.
Calzado tampoco se lo esperaba. Con una carrera de casi 30 años, hasta le fecha no había llamado la atención, al parecer, de la Academia, a pesar de sus muy exitosos álbumes. Sin embargo, «de pronto llega este importante reconocimiento, que no te lo crees, pero que está ahí para por medio de él también premiar a Juan Formell, Adalberto Álvarez, Habana D’ Primera... Porque todos son parte de esta realidad».
De paso, David agradeció a la Egrem por confiar en la Charanga Habanera y por posibilitar que ya ande sonando Vivito..., que ahora ha logrado lo que hasta el momento solo había conseguido Van Van. Y claro que Mario Escalona, director general de la conocida casa disquera, no puede menos que sentir orgullo, porque significa que «Cuba es respetada por lo que hacemos. Qué bueno que la música siga tocando puertas para que el mundo continúe abriéndose a Cuba, como Cuba se está abriendo para el mundo».
Por supuesto que Vivito y coleando, El más grande y universal, Canciones de Cri Cri «El Grillo Cantor»... evidencian el amor y la confianza que los músicos cubanos tienen en las casas discográficas del patio, que cada año que transcurre se ven más representadas en los Grammy Latinos. Así lo ve Marta Bonet, vicepresidenta del ICM, quien también aplaudió a producciones como Visualízate (Álbum de Fusión Tropical) y Hasta que se seque el Malecón (Mejor fusión/interpretación urbana), propuestas de Gente de Zona y Jacob Forever, respectivamente, con el acompañamiento de empresas de una Isla que no deja que se dude que la música le pertenece.