Frente al espejo
«Estoy de acuerdo ciento por ciento con usted, Doctora (Las ciudades también son mortales, Graziella Pogolotti, 20 de diciembre). Se necesitan racionalidad y sentido de la sostenibilidad cuando se piensa en las ciudades. Yo, en lo personal, veo La Habana futura, mi querida ciudad natal, como un sitio verde donde armonicen la historia y la tecnología. De ese modo, podremos seguir disfrutando del legado y de las bondades de la ciudad».
«(…) Creo que La Habana, precisamente por no haber sido parte de la fiebre arquitectónica irracional que inundó al siglo XX, está en mejores condiciones para hacer una transición a los principios de la arquitectura sostenible. Y como con tantas otras cosas en nuestro país, el potencial está. Creo que si activamos a nuestros técnicos y profesionales podremos obtener resultados hermosos». (Andrés)
«(...) Este artículo de hoy invita a todos a participar e imaginar en la práctica La Habana moderna, donde el bienestar del individuo sea lo primero en cuanto a calidad y cualidad de vida en su hábitat. Todo es posible cuando las buenas voluntades se juntan ante el desafío que representa». (Francisco Rivero)
«Gracias, Iris (Un catálogo de tías, Iris Oropesa, 19 de diciembre). Has provocado recuerdos adorables. Ya no tengo tías, pero a las mías las llevo en el corazón, en especial a mi tía Ala (no sé por qué la llamaba así), que era traviesa, alegre, rigurosa, pero por encima de todo, tía». (Maritza de la C.)