Frente al espejo
«Queremos felicitar al colectivo de compañeros que realizó el reportaje Cuanto cuesta tocar el cielo (domingo 25 de mayo), por la calidad del trabajo y sobre todo por lo importante de divulgar a nuestro pueblo algo no del todo conocido, que es la incorporación de los jóvenes con discapacidad a la Educación Superior. Este es uno de los mayores logros de nuestro país». (Eduardo Mora, secretario de la Cátedra Estudios sobre discapacidad, Universidad de La Habana)
«Respeto su opinión acerca de este icono del rock (Una pesadilla del sueño americano, Joaquín Borges-Triana, 17 de abril), pero no estoy totalmente de acuerdo con el enfoque que usted le da a la hora de llamarlo mercancía. El hecho de que su música haya trascendido a niveles astronómicos en factor de venta, no quiere decir que su mensaje sea otra mercancía. Sabemos las letras de algunas de ellas, pero por qué no nos referirnos a las otras que critican, demandan, juzgan y condenan los males de las sociedades donde el dinero y el poder abundan». (Vivian)
«Soy un asiduo de su espacio (Sección Coloquiando, Luis Sexto) y comparto muchas de las ideas que trata de difundir y defender. Creo como usted que hay que correr el riesgo y decir las cosas como son, sin tapujos ni adornos que a veces hacen tanto daño como las acciones bandidescas del enemigo. Gracias por seguir escribiendo y saludos al resto del equipo. Reciba las felicitaciones de todos los revolucionarios que creemos en un mundo de justicia y equidad social». (Noel Ascanio Montero)
«He leído su artículo referente al anhelado Salón de la Fama del béisbol cubano (Hugo García, domingo 25 de mayo). Coincido con usted y me sumo al criterio de la imperiosa necesidad de crear dicho Salón, con el nombre que cualquier erudito pueda llamarlo, pero que se construya e inaugure y sirva, como bien dice, como centro sociocultural y ¿por qué no?, de atracción para el turismo nacional e internacional. También coincido con usted y con el querido Eddy Martín, siempre presente cuando se hable de pelota, en que ese Salón debe hacerse en el Palmar de Junco matancero, por derecho propio. Tuve el privilegio, a finales de la década de los años 50 y principios de la del 60, de jugar en ese estadio en las ligas de “Los Cubanitos” con figuras emblemáticas como Félix Isasi, Rigoberto Rosique, Curro Pérez, entre otros, que dieron gloria a nuestro país en la arena internacional. Coincido en hacer una encuesta para conocer criterios de nuestra población y pienso, aunque no soy miembro de ninguna peña deportiva, que se podría trabajar con esos aficionados que conocen y están al día de nuestro deporte nacional». (Heriberto Muñiz Álvarez)
«Creo que es hora de tener nuestro Salón. (Se refiere al Salón de la Fama del béisbol cubano). ¿México tiene más tradición que Cuba en la pelota? Sin embargo, tiene su Salón. Una buena junta de comentaristas deportivos y aficionados del país deben impulsar este sueño del béisbol cubano. Es la hora de recolectar recuerdos históricos. Tenemos material para el mejor salón de la fama de América, y Varadero está a media hora del Palmar. El más exigente no tendrá nada que perder en esa gira». (Rodolfo Valdés, Nueva York)